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Denunciado un alto cargo de Sant Vicenç dels Horts por acoso sexual
Adolfo Gómez, gerente del Instituto de Deportes, tacha las acusaciones de falsas
Una funcionaria dice que la amenazó con despedir a su hijo si no se acostaba con él
Martes, 7 de septiembre del 2010.FERRAN COSCULLUELA.BARCELONA
Una funcionaria del Ayuntamiento de Sant Vicenç del Horts (Baix Llobregat) ha denunciado ante los Mossos al gerente del Instituto Municipal de Deportes, Adolfo Gómez, por haberla acosado presuntamente durante 3 años con la amenaza de que si no se acostaba con él despediría a su hijo del organismo, donde el joven trabajaba desde el 2007.
Pilar Caparà, de 52 años y empleada de la Oficina de Atención Ciudadana, sostiene que el gerente empezó con piropos, a mediados del 2007, y meses más tarde la telefoneó en varias ocasiones para hacerle proposiciones sexuales, en algunas ocasiones con palabras soeces y obscenas.
La funcionaria afirma que guardó silencio por miedo a la reacción que pudiera tener su marido.
A principios del 2008, y siempre según la denuncia, Gómez la siguió un día cuando iba al lavabo, la cogió de la cintura y le tocó los pechos.
Ella se resistió, le echó del aseo y siguió sin decir nada.
La denunciante asegura que el gerente le dijo que su hijo iba «a pagar» por sus negativas.
Meses después, el instituto municipal castigó al joven, Julià Marqués, con 3 días de suspensión de empleo y sueldo por negarse a recoger unos excrementos de la piscina.
DOS EXPEDIENTES
Caparà afirma que las llamadas y amenazas siguieron de forma intermitente, hasta que el gerente abrió un IIº expediente al chico.
Este procedimiento no se resolvió, ya que la familia acudió a un abogado y el caso se alargó hasta que la empresa Llop Gestió de l'Esport asumió el mantenimiento de las piscinas municipales. Esta firma, a la que se subrogaron la mayoría de los empleados del organismo local, despidió a Marqués el pasado 30 de julio, 1 mes y medio después de hacerse cargo de la gestión de las instalaciones, y pese al pacto con el comité de que no habría reducciones de plantilla en 1 año.
El motivo aducido: bajo rendimiento.
Al día siguiente, Pilar Caparà contó lo sucedido a su marido y presentó la denuncia.
«Sentí mucha rabia e impotencia porque vi que [Gómez] había cumplido sus amenazas. Temía la reacción de mi marido y de mi madre, enferma, pero el despido fue la gota que colmó el vaso», recuerda la funcionaria, que está de baja por depresión y que en agosto fue tratada de una crisis de ansiedad.
INJURIAS Y CALUMNIAS.
Eleuterio Sánchez, abogado del gerente, afirma que todas las acusaciones que constan en la denuncia, que califica de «calumniosa e injuriosa», son «falsas».
El letrado explica que su defendido también ha interpuesto una denuncia contra el marido de Caparà por «calumnias e injurias» a raíz de una llamada telefónica y unos pasquines difundidos en el pueblo.
El primer teniente de alcalde de Sant Vicenç, Carlos Cháfer (PSC), declaró ayer que se trata de un asunto «delicado» y que el ayuntamiento respeta la presunción de inocencia de Gómez, cuya gestión al frente del instituto municipal defendió.
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