Mónica de Haro|8 de enero de 2016
Un encuentro sexual ‘normalito’ dura unos 7 minutos.
Esto es lo que dicen los expertos: el Journal of Sexual Medicine asegura que 7 minutos son suficientes para tener relaciones sexuales completamente satisfactorias.
Otro
estudio tomado como referencia -realizado en 2008 por Eric Corty y
Jenay Guardiani, de la Universidad Estatal de Pensilvania-, concluye que
el encuentro es “demasiado corto” cuando dura de 1 a 2 minutos;
“adecuado”, de 3 a 7 minutos; “deseable” de 7 a 13; y “muy largo”, de 10 a 30.
Para
calcular estos datos los investigadores realizaron una encuesta a
psicólogos, médicos, trabajadores sociales, terapeutas matrimoniales y
de familia, y enfermeras que forman parte de la Sociedad para la Terapia
y la Investigación Sexual.
Sin embargo, en esta investigación no se contabilizan los juegos preliminares, sino que solo se contempla el coito en sí. ¡Craso error!
Es decir que medir el encuentro sexual únicamente en función de la erección y la eyaculación del hombre es un error en el que siempre caemos (tanto ellos como ellas).
“El acto sexual no empieza cuando él tiene una erección ni acaba cuando eyacula”, explica a El País la sexóloga Cristina Callao.
Las
caricias, los besos, la excitación, la compenetración, los deseos… Todo
cuenta, de otro modo estamos limitando el sexo al coito y esto lo
desvirtúa.
De hecho, muchos consideran que los preliminares son
los que marcan la diferencia entre una buen encuentro sexual y
uno ‘decepcionante’. Y es que los juegos pueden darse al principio, en
medio, al final y hasta puede ser en sí la base del encuentro sexual.
Para determinar cuál sería la duración ideal de los preliminares un equipo de investigadores de la Universidad de New Brunswick preguntó a hombres y mujeres para después hacer una comparativa con su experiencia real.
Los datos objetivos reportaron un promedio de 11 a 13 minutos de juego previo y de 7 a 8 minutos de coito.
Con
respecto a las expectativas, las mujeres apuntaron 8 minutos más de
juego y 7 más de coito, mientras que los hombres señalaron 5
minutos más de preliminares y 11 más de penetración vaginal.
La psicóloga encargada del estudio, E. Sandra Byers, explica que esto se debe “el efecto de dilatación del tiempo”,
es decir, que lo que nosotros pensamos que hemos tenido una hora de
sexo, cuando en realidad la sesión apenas ha durado 15 minutos.
En definitiva, que lo de menos es el tiempo ya que también influye la calidad no sólo la duración del encuentro.
Además, el acto sexual puede durar lo que queramos
al tener la opción de ‘ralentizar’ el momento culmen dejando que la
mujer tenga un orgasmo antes de la penetración o realizando ejercicios
(de respiración, estimulación o masturbación) para ‘parar’ la
eyaculación.