Informes de la Fundación Anar desde 2003: http://www.anar.org/home.html
http://www.deia.com/es/digital/sociedad/2007/08/11/391380.php
La Fundación ANAR presenta hoy el Informe 2006 de la Infancia y la Adolescencia en España
MADRID, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo (ANAR) presenta hoy el Informe 2006 de la Infancia y Adolescencia en España, elaborado a partir de los datos obtenidos a través del 'Teléfono ANAR' 900 20 20 10.
Según informó la entidad en un comunicado, el objetivo de este informe es transmitir a la sociedad los problemas que afectan a los niños y adolescentes para que todos aquellos que se encuentran en el entorno de los menores --padres, profesionales, organismos públicos y privados-- y la sociedad en general, "tomen conciencia de lo que les preocupa y puedan actuar en consecuencia".
El 'Teléfono ANAR', una línea ayuda gratuita y confidencial, que opera en todo el territorio nacional las 24 horas del día, 365 días al año, ofrece a los menores una ayuda profesional, psicológica, social y jurídica, cuando éstos tienen problemas, se encuentran en situación de riesgo, o simplemente están desorientados en un momento determinado.
Esta atención, según ANAR, "también va dirigida a aquellos adultos que demanden orientación para ayudar a un menor de su entorno", a través del
'Teléfono del Adulto ANAR' --91 726 01 01 y 600 50 51 52--.
A lo largo de 2006, el Teléfono ANAR recibió 158.496 llamadas, de las cuales 3.606 fueron a través de la línea del adulto.
De todas estas llamadas hubo 8.809 derivaciones sociales y 4.012 derivaciones jurídicas.
LOS TEMAS QUE MÁS LES PREOCUPAN.
Como adelanto de los datos recogidos en este informe, ANAR destaca entre los temas "más consultados" los problemas de relación familiar, maltrato, bullying, problemas psicológicos, problemas en las separaciones, sexualidad y adicciones.
Asimismo, la violencia o acoso escolar --'bullying'-- y la presencia de violencia doméstica en el entorno de los menores, "continúan aumentando", según la fundación.
En el caso de los adultos, destacan los problemas relacionados con la separación, seguidos de situaciones de maltrato y 'bullying' y la violencia hacia los padres.
La Fundación ANAR es una organización sin ánimo de lucro, creada en 1970, para la defensa y protección de la infancia.
En http://www.discapnet.es/Discapnet/Castellano/Actualidad/Nueva_Hemeroteca/detalle?id=156800
LOS PROBLEMAS DE RELACIÓN FAMILIAR Y LA SEXUALIDAD, PRINCIPALES MOTIVOS DE LAS LLAMADAS AL TELÉFONO DEL MENOR ANAR
SERVIMEDIA
MADRID, 02-OCT-2007
Los problemas de relación familiar y con el entorno próximo y la sexualidad son los principales motivos por los que los niños y adolescentes llaman al Teléfono del Menor 900 20 20 10, según el "Informe 2006 de la Infancia y la Adolescencia en España", de la Fundación Anar, que gestiona este servicio.
El director de programas de la Fundación Anar, Benjamín Ballesteros, señaló que este teléfono recibió el pasado año 158.496 llamadas, de las que 3.606 fueron a través de la Linea del Adulto. De todas ellas, se realizaron 8.809 derivaciones sociales y 4.012 derivaciones jurídicas.
Ballesteros comentó que un 22,4% de las llamadas de los menores a este servicio se referían a problemas de relación con la familia o el entorno, entre las que destacan las relativas a las consecuencias psicológicas de la separación de sus padres.
El informe señala también que un 9,2% de las llamadas al citado teléfono fueron relativas al sexo, lo que, según Ballesteros, demuestra que la sexualidad sigue siendo un tabú en las familias.
Además, los menores utilizaron este servicio para exponer casos de:
1.- maltrato (9,1%),
2.- problemas psicológicos (8,7%),
3.- bullying (8,2%),
4.- problemas escolares (7%) y
5.- problemas en la separación (4,3%).
En un 7,10% del total de estas llamadas se detectó la presencia de violencia doméstica.
De estos datos, Ballesteros comentó el aumento de llamadas relativas al bullying, que, según dijo, se debe a un mayor conocimiento por parte de los menores sobre este problema.
En cuanto a las llamadas de los adultos al Teléfono de Anar, los problemas relacionados con:
1.- la separación supusieron un 14%, seguidas de
2.- situaciones de maltrato (11%) y
3.- bullying (11%).
El informe también destaca que el 40,9% de los menores que acuden a este servicio viven en familias monoparentales en las que el cabeza de familia es la madre.
Asimismo, el 10% de los niños y adolescentes que llamaron a este teléfono son inmigrantes.
Finalmente, Ballesteros expuso recomendaciones a los padres, instituciones y profesionales, entre ellas, que los progenitores hablen y escuchen más tiempo a sus hijos para participar de sus intereses.
En este sentido, el informe considera "absolutamente imprescindible" un cambio de los horarios españoles para que se igualen a los de la Unión Europea.
Este Blog de un Padre Divorciado, con Custodia Compartida pero producto de la injusta normativa vigente: Aquí Encontrarás información sobre lo que sufren los Padres, Madres y sus Hijos;Sobre Actividades: Conferencias, Jornadas,... Se clasifican por ETIQUETAS o TEMAS. Contacta con el grupo de Padres y Madres por la CUSTODIA COMPARTIDA de los hijos en el Foro ó en usedimad@gmail.com ó www.padresdivorciados.es Unete a PAMAC (649 116 241)
sábado, 6 de octubre de 2007
El Divorcio según las edades de los menores
La separacion según la edad de los hijos.
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ND004
Los niños pequeños no comprenden la separación en toda su dimensión, pero cuando la pareja se rompe reaccionan de muchas maneras.
En un intento por recuperar la seguridad, algunos pequeños desarrollan problemas temporales de comportamiento o actúan de forma demasiado infantil para su edad.
Pueden reaccionar poniéndose más agresivos, negándose a colaborar o retrayéndose en si mismos.
Tienen conductas regresivas, como volver a orinarse en los pantalones, no dormir ni comer solos, hablar a media lengua, etc.
Pueden volverse vulnerables a dolencias y enfermedades físicas.
Los jóvenes entre los diez y los catorce años encuentran difícil el divorcio de sus padres, aunque tienen suficiente edad para comprenderlo. Pueden sentir mucha tristeza o experimentar un sentimiento de pérdida.
Pero en muchos casos, la separación de los padres puede no constituirse en un problema para los mayorcitos. Por el contrario, muchas veces ven en ella una solución.
En general, en la adolescencia los jóvenes presentan temores que están relacionados con la incertidumbre respecto al futuro y con la inseguridad que experimentan por su desempeño posterior.
Los problemas de conducta son comunes a estas edades, ya que algunos se sienten víctimas del divorcio y expresan su enojo rompiendo las reglas establecidas, escapan de casa, abusan del alcohol o de las drogas, son sexualmente promiscuos o tienen “malas compañías”.
También el desempeño escolar puede afectarse negativamente. Ya sea como niños o adolescentes los hijos de parejas que no han podido separarse en buenos términos, frecuentemente tienen problemas en sus relaciones y autoestima.
Tenga en cuenta:
-Mantener las normas y las reglas, aunque con cierta flexibilidad es un factor muy importante para que todos se ajusten a la nueva vida
-Tomar con calma las distintas expresiones afectivas de los niños, atendiendo a estos estado emocionales, pero no “aliándose” con el niño. Recuerde que Usted es el adulto
-Estar atentos a señales de estrés, ansiedad o temores que no se vayan apaciguando con el tiempo
-Estimular al niño para que continué con sus actividades habituales
-Recuerde que en cada etapa habrá procesos de ajuste que tomarán tiempo y paciencia por parte de los padres
Por: María Elena López
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ND004
Los niños pequeños no comprenden la separación en toda su dimensión, pero cuando la pareja se rompe reaccionan de muchas maneras.
En un intento por recuperar la seguridad, algunos pequeños desarrollan problemas temporales de comportamiento o actúan de forma demasiado infantil para su edad.
Pueden reaccionar poniéndose más agresivos, negándose a colaborar o retrayéndose en si mismos.
Tienen conductas regresivas, como volver a orinarse en los pantalones, no dormir ni comer solos, hablar a media lengua, etc.
Pueden volverse vulnerables a dolencias y enfermedades físicas.
Los jóvenes entre los diez y los catorce años encuentran difícil el divorcio de sus padres, aunque tienen suficiente edad para comprenderlo. Pueden sentir mucha tristeza o experimentar un sentimiento de pérdida.
Pero en muchos casos, la separación de los padres puede no constituirse en un problema para los mayorcitos. Por el contrario, muchas veces ven en ella una solución.
En general, en la adolescencia los jóvenes presentan temores que están relacionados con la incertidumbre respecto al futuro y con la inseguridad que experimentan por su desempeño posterior.
Los problemas de conducta son comunes a estas edades, ya que algunos se sienten víctimas del divorcio y expresan su enojo rompiendo las reglas establecidas, escapan de casa, abusan del alcohol o de las drogas, son sexualmente promiscuos o tienen “malas compañías”.
También el desempeño escolar puede afectarse negativamente. Ya sea como niños o adolescentes los hijos de parejas que no han podido separarse en buenos términos, frecuentemente tienen problemas en sus relaciones y autoestima.
Tenga en cuenta:
-Mantener las normas y las reglas, aunque con cierta flexibilidad es un factor muy importante para que todos se ajusten a la nueva vida
-Tomar con calma las distintas expresiones afectivas de los niños, atendiendo a estos estado emocionales, pero no “aliándose” con el niño. Recuerde que Usted es el adulto
-Estar atentos a señales de estrés, ansiedad o temores que no se vayan apaciguando con el tiempo
-Estimular al niño para que continué con sus actividades habituales
-Recuerde que en cada etapa habrá procesos de ajuste que tomarán tiempo y paciencia por parte de los padres
Por: María Elena López
Reacciones de los niños ante el Divorcio
Reacciones de los niños según las etapas.
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ND005
En la primera etapa de la separación es muy factible que se presenten tristezas o momentos depresivos que son normales.
Al principio, los niños no tienen mucha conciencia de lo que sucede.
Pero a medida que pasa el tiempo experimentan los efectos de la situación, como la ausencia de la persona que ya no está para acompañarlos a tomar el bus, comer juntos o hacer las tareas.
No es extraño que se manifieste rabia hacia uno de los padres por sentir que no hizo lo suficiente para evitar la ruptura.
En algunos casos los niños pueden sentirse culpables por la separación de los padres, sobre todo si hay recientes fallas cometidas por los hijos.
Es posible que manifiesten cierto desprendimiento emocional, que a simple vista pareciera indiferencia o, por el contrario, podrían evidenciar un apego excesivo a sus padres o a uno de ellos, por miedo a un nuevo abandono.
Otros reprimen sus sentimientos acerca de esta situación, y se dedican a diversas actividades como pretendiendo que nada ha pasado.
Lo hacen para no alterar a sus padres o para evadir la tristeza, la confusión, la vergüenza y el abandono que este acontecimiento les produce. Algunas veces los hijos toman partido por uno de sus padres o hacen recaer la responsabilidad de la separación en el padre o la madre.
Con frecuencia los niños cambian de estado de ánimo sin motivo aparente y pueden pasar de estar muy eufóricos, a estar apáticos o retraídos.
Igualmente, mostrarse más irascibles o sensibles frente a algunas situaciones que antes no les afectaba.
Algunos se vuelven “melodramáticos” y cualquier evento aun insignificante puede provocarle una reacción exagerada.
Estos cambios pueden ser muy intensos al comienzo de la separación y poco a poco ir disminuyendo.
Es posible que aparezcan con eventos como por ejemplo, cuando las familias se reorganizan en nuevas relaciones de pareja.
Es muy frecuente que frente a esta situación, se generen celos y rivalidades entre hijos y padrastros, al igual que entre padres y padrastros.
Esta constituye una de las etapas que puede acarrear mayores dificultades de adaptación y ajuste por parte de sus diferentes miembros, por esta razón es necesario implementar algunas acciones y mantener una actitud abierta y comprensiva.
Una de ellas es leer entre líneas estas reacciones de los niños y no asumirlas como algo personal. En algunos casos es necesario reflejarlas a los niños pero este debe hacerse con ternura y amor, de tal forma que estos entiendan que pueden ayudar a que la situación sea un poco más fácil, pero que siguen contando con el soporte y comprensión de los adultos.
De cualquier manera, los padres deben estar atentos a las reacciones y estados de los niños para ayudarles a superarlos con más tranquilidad y apoyo.
Por: María Elena López
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ND005
En la primera etapa de la separación es muy factible que se presenten tristezas o momentos depresivos que son normales.
Al principio, los niños no tienen mucha conciencia de lo que sucede.
Pero a medida que pasa el tiempo experimentan los efectos de la situación, como la ausencia de la persona que ya no está para acompañarlos a tomar el bus, comer juntos o hacer las tareas.
No es extraño que se manifieste rabia hacia uno de los padres por sentir que no hizo lo suficiente para evitar la ruptura.
En algunos casos los niños pueden sentirse culpables por la separación de los padres, sobre todo si hay recientes fallas cometidas por los hijos.
Es posible que manifiesten cierto desprendimiento emocional, que a simple vista pareciera indiferencia o, por el contrario, podrían evidenciar un apego excesivo a sus padres o a uno de ellos, por miedo a un nuevo abandono.
Otros reprimen sus sentimientos acerca de esta situación, y se dedican a diversas actividades como pretendiendo que nada ha pasado.
Lo hacen para no alterar a sus padres o para evadir la tristeza, la confusión, la vergüenza y el abandono que este acontecimiento les produce. Algunas veces los hijos toman partido por uno de sus padres o hacen recaer la responsabilidad de la separación en el padre o la madre.
Con frecuencia los niños cambian de estado de ánimo sin motivo aparente y pueden pasar de estar muy eufóricos, a estar apáticos o retraídos.
Igualmente, mostrarse más irascibles o sensibles frente a algunas situaciones que antes no les afectaba.
Algunos se vuelven “melodramáticos” y cualquier evento aun insignificante puede provocarle una reacción exagerada.
Estos cambios pueden ser muy intensos al comienzo de la separación y poco a poco ir disminuyendo.
Es posible que aparezcan con eventos como por ejemplo, cuando las familias se reorganizan en nuevas relaciones de pareja.
Es muy frecuente que frente a esta situación, se generen celos y rivalidades entre hijos y padrastros, al igual que entre padres y padrastros.
Esta constituye una de las etapas que puede acarrear mayores dificultades de adaptación y ajuste por parte de sus diferentes miembros, por esta razón es necesario implementar algunas acciones y mantener una actitud abierta y comprensiva.
Una de ellas es leer entre líneas estas reacciones de los niños y no asumirlas como algo personal. En algunos casos es necesario reflejarlas a los niños pero este debe hacerse con ternura y amor, de tal forma que estos entiendan que pueden ayudar a que la situación sea un poco más fácil, pero que siguen contando con el soporte y comprensión de los adultos.
De cualquier manera, los padres deben estar atentos a las reacciones y estados de los niños para ayudarles a superarlos con más tranquilidad y apoyo.
Por: María Elena López
¿ Como hablar a los niños del Divorcio ?
Como hablar a los niños del divorcio.
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ND009
Hablar con los hijos para comunicar la decisión de la separación es uno de las situaciones más difíciles para los padres en este proceso.
Aunque siempre es un evento doloroso, tener en cuenta algunos aspectos puede hacer más llevadero este momento.
Es preferible que ambos padres estén juntos en esta oportunidad, pero si esto no es posible, es igualmente importante mostrarse abierto y comprensivo con los hijos.
-Planee una reunión con la clara intención de crear una atmósfera de comunicación y comprensión
-Ponga un poco de voluntad para entender a la otra persona hacer más fácil la situación
-No use este momento para discutir y pelear y hacer reclamos
-Cuénteles sobre los planes de separación. No es necesario dar todos los detalles, muéstrele que algunas cosas se irán resolviendo en el camino
-Los hijos deben sentir que pueden preguntar lo que deseen y saber que sus padres responderán con tanta honestidad como les sea posible
-Explíqueles por qué está ocurriendo la separación, no hay que decirlo todo, pero si dar información sencilla y veraz que pueda ser comprendida por el niño de acuerdo a la edad en la que se encuentre.
Los niños, especialmente los pequeños, necesitarán saber con precisión lo que harán, cuando verán al padre que no tiene la custodia, en que casa dormirán, etc.
Con ellos, seguramente será preciso explicarles varias veces. Por esta razón, una vez tomada la decisión, formalice y aclare con la otra persona los términos de la separación, para evitar alargar penosamente esta situación.
De otro lado, es necesario dar a los niños toda la seguridad económica que sea posible.
Estos no deben asumir ninguna posición con respecto al manejo que sus padres hacen del dinero, aun si tienen que ver con la atención a sus necesidades.
Trate de estar tranquilo cuando se reúna con su pareja, especialmente si están en presencia de los niños. Actitudes como amenazar al otro, herirse verbalmente o romper en llanto descontroladamente, crean confusión y temor en los menores.
Actuar de este modo puede impactar al niño de forma importante y generar dificultades mas tarde en su comportamiento.
Poner un poco de esfuerzo para tener una actitud comprensiva, aunque se tengan muchos reclamos y haya aspectos sin resolver, es la manera mas racional de asumir todo lo que conlleva este proceso.
Entender a la otra persona no significa que se este cediendo al otro todos los derechos, sino que se está en el propósito de facilitar el manejo de las situaciones que se van presentando.
En consecuencia, es necesario asumir la realidad con calma y transmitirle a los hijos el mensaje que aunque este evento resulte especialmente difícil los adultos estarán a cargo de ella.
El seguirá contando con el apoyo, el afecto y el cuidado de sus padres aunque estos ya no estén juntos.
Por: María Elena López
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ND009
Hablar con los hijos para comunicar la decisión de la separación es uno de las situaciones más difíciles para los padres en este proceso.
Aunque siempre es un evento doloroso, tener en cuenta algunos aspectos puede hacer más llevadero este momento.
Es preferible que ambos padres estén juntos en esta oportunidad, pero si esto no es posible, es igualmente importante mostrarse abierto y comprensivo con los hijos.
-Planee una reunión con la clara intención de crear una atmósfera de comunicación y comprensión
-Ponga un poco de voluntad para entender a la otra persona hacer más fácil la situación
-No use este momento para discutir y pelear y hacer reclamos
-Cuénteles sobre los planes de separación. No es necesario dar todos los detalles, muéstrele que algunas cosas se irán resolviendo en el camino
-Los hijos deben sentir que pueden preguntar lo que deseen y saber que sus padres responderán con tanta honestidad como les sea posible
-Explíqueles por qué está ocurriendo la separación, no hay que decirlo todo, pero si dar información sencilla y veraz que pueda ser comprendida por el niño de acuerdo a la edad en la que se encuentre.
Los niños, especialmente los pequeños, necesitarán saber con precisión lo que harán, cuando verán al padre que no tiene la custodia, en que casa dormirán, etc.
Con ellos, seguramente será preciso explicarles varias veces. Por esta razón, una vez tomada la decisión, formalice y aclare con la otra persona los términos de la separación, para evitar alargar penosamente esta situación.
De otro lado, es necesario dar a los niños toda la seguridad económica que sea posible.
Estos no deben asumir ninguna posición con respecto al manejo que sus padres hacen del dinero, aun si tienen que ver con la atención a sus necesidades.
Trate de estar tranquilo cuando se reúna con su pareja, especialmente si están en presencia de los niños. Actitudes como amenazar al otro, herirse verbalmente o romper en llanto descontroladamente, crean confusión y temor en los menores.
Actuar de este modo puede impactar al niño de forma importante y generar dificultades mas tarde en su comportamiento.
Poner un poco de esfuerzo para tener una actitud comprensiva, aunque se tengan muchos reclamos y haya aspectos sin resolver, es la manera mas racional de asumir todo lo que conlleva este proceso.
Entender a la otra persona no significa que se este cediendo al otro todos los derechos, sino que se está en el propósito de facilitar el manejo de las situaciones que se van presentando.
En consecuencia, es necesario asumir la realidad con calma y transmitirle a los hijos el mensaje que aunque este evento resulte especialmente difícil los adultos estarán a cargo de ella.
El seguirá contando con el apoyo, el afecto y el cuidado de sus padres aunque estos ya no estén juntos.
Por: María Elena López
La Angustia de la Separación en los Niños
La angustia de la separación en los niños.
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ND010
La angustia de la separación es un miedo excesivo que siente el niño a separarse temporalmente de sus padres porque dentro de su lógica infantil siente que aun una ausencia temporal podría ser definitiva.
Experimenta temor de ser abandonado y por esto expresa una gran angustia ante la posibilidad de que sus padres se alejen.
Este cuadro generalmente es pasajero y se presenta incluso en niños entre los ocho y los doce meses de vida.
A medida que aprenden conceptos como el tiempo y entienden que sus padres se pueden ir pero van a regresar, dicho sentimiento irá desapareciendo.
Pero cuando el problema se prolonga y los niños no logran controlar estos sentimientos y cada vez que se separan de sus progenitores este aparece con más intensidad, se debe buscar ayuda profesional.
Cuando los padres se separan como pareja, los niños experimentan una gran perdida afectiva.
En algunos niños este sentimiento de separación se vuelve mas intenso y durante algún tiempo pueden sentir miedo de que esto ocurra nuevamente con el otro progenitor.
En esos casos, ellos sienten temor cada vez que no están con uno de sus padres o miembros de la familia más cercanos, pues creen que algo malo les va a pasar.
Cuando tiene que separarse de sus padres por que estos deben salir o el tiene que quedarse en el colegio se muestra muy ansioso y resistente a quedarse solo.
Muchas veces puede presentar síntomas de pánico como temblor, sudoración excesiva, vómito o dificultad para respirar.
Son incapaces de apartarse de la madre a quien se aferran ante la inminencia de quedarse solos aunque sea por un momento.
Muestran rechazo a otros adultos que no sean los papás o personas muy cercanas.
Aparecen tics como comerse las uñas, halarse el pelo o morderse los labios.
También puede tener dificultad para dormir o pesadillas y preocupaciones por perderse.
Se muestra muy preocupado por el bienestar de sus padres y constantemente alude a que algo malo pueda pasarles.
Algunas veces esta reacción puede ser temporal y responde a la manera como el niño esta elaborando la separación de sus padres.
En otras ocasiones persiste afectando su funcionamiento general.
Si esto ocurre es preciso solicitar ayuda profesional. En todos los casos es importante que los padres sean sensibles a estos sentimientos de los niños y tengan una actitud comprensiva y amorosa para ayudarles a entender sus propios sentimientos, a expresarlos de manera conciente y a encontrar recursos internos para enfrentarlos.
Por: María Elena López
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ND010
La angustia de la separación es un miedo excesivo que siente el niño a separarse temporalmente de sus padres porque dentro de su lógica infantil siente que aun una ausencia temporal podría ser definitiva.
Experimenta temor de ser abandonado y por esto expresa una gran angustia ante la posibilidad de que sus padres se alejen.
Este cuadro generalmente es pasajero y se presenta incluso en niños entre los ocho y los doce meses de vida.
A medida que aprenden conceptos como el tiempo y entienden que sus padres se pueden ir pero van a regresar, dicho sentimiento irá desapareciendo.
Pero cuando el problema se prolonga y los niños no logran controlar estos sentimientos y cada vez que se separan de sus progenitores este aparece con más intensidad, se debe buscar ayuda profesional.
Cuando los padres se separan como pareja, los niños experimentan una gran perdida afectiva.
En algunos niños este sentimiento de separación se vuelve mas intenso y durante algún tiempo pueden sentir miedo de que esto ocurra nuevamente con el otro progenitor.
En esos casos, ellos sienten temor cada vez que no están con uno de sus padres o miembros de la familia más cercanos, pues creen que algo malo les va a pasar.
Cuando tiene que separarse de sus padres por que estos deben salir o el tiene que quedarse en el colegio se muestra muy ansioso y resistente a quedarse solo.
Muchas veces puede presentar síntomas de pánico como temblor, sudoración excesiva, vómito o dificultad para respirar.
Son incapaces de apartarse de la madre a quien se aferran ante la inminencia de quedarse solos aunque sea por un momento.
Muestran rechazo a otros adultos que no sean los papás o personas muy cercanas.
Aparecen tics como comerse las uñas, halarse el pelo o morderse los labios.
También puede tener dificultad para dormir o pesadillas y preocupaciones por perderse.
Se muestra muy preocupado por el bienestar de sus padres y constantemente alude a que algo malo pueda pasarles.
Algunas veces esta reacción puede ser temporal y responde a la manera como el niño esta elaborando la separación de sus padres.
En otras ocasiones persiste afectando su funcionamiento general.
Si esto ocurre es preciso solicitar ayuda profesional. En todos los casos es importante que los padres sean sensibles a estos sentimientos de los niños y tengan una actitud comprensiva y amorosa para ayudarles a entender sus propios sentimientos, a expresarlos de manera conciente y a encontrar recursos internos para enfrentarlos.
Por: María Elena López
Los Niños y el Divorcio
Como sienten los niños el divorcio.
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ND003
En general, los niños sienten lo mismo que un adulto frente a una situación difícil.
Esto es tristeza, miedo, confusión, desorientación, soledad y temor al abandono.
Ello les crea inseguridad y angustia porque pueden llegar a pensar que si uno de sus padres se marchó, el otro también puede hacerlo, y se apegan de forma exagerada a uno de ellos.
También sienten inquietud y confusión frente a la posibilidad que sus padres lleguen a tener nuevas parejas.
Cuando esto sucede es preciso reforzar su autoestima, darles más afecto, demostrarles que siguen siendo importantes, que no van a ser desplazados.
Expresiones como: “Aunque no puedo vivir con tu madre (padre), ambos te queremos. Nada puede cambiar eso”, les da seguridad de que, por encima de todo, cuentan con el cariño de sus padres.
Los niños tienen momentos de esparcimiento en los que ríen, juegan y comparten con sus amigos. Esto le permite poner sus afectos y energía en otras personas y actividades.
Al igual que los adultos pueden tener ratos de pesimismo y perder temporalmente la fe en que la vida se normalice.
Pueden expresar cosas como “para que tanto esfuerzo si ya no hay nada que hacer”.
Al mismo tiempo crear escenas en su imaginación en las que idealizan un final feliz y pueden hacer preguntas como “cierto mami que papi va a volver y vamos a estar todos juntos otra vez”.
Por otra parte, es posible que durante el proceso, o después de la separación manifiesten cierto desprendimiento emocional que a simple vista pareciera indiferencia, o por el contrario podrían evidenciar un apego excesivo por miedo a un nuevo abandono.
Algunos pueden presentar trastornos del sueno (pesadillas, insomnio, terrores nocturnos o miedo a dormir solo), de alimentación (comer en exceso o dejar de comer), de los hábitos (perder el control de esfínteres, volver a chuparse el dedo u otras conductas que no corresponden a su edad).
Pueden desarrollar tics nerviosos o enfermarse con frecuencia (padecen fiebres, gripa o alergias), porque las defensas inmunológicas disminuyen debido a las tensiones.
Igualmente, es probable que se afecte su rendimiento escolar por la dificultad para prestar atención al cambio en sus hábitos de estudio.
Pueden mostrarse irritables o susceptibles con sus compañeros y profesores y tener problemas de adaptación escolar.
Es importante tener en cuenta que la forma en que expresan estas emociones no siempre es abierta y explicita, sino más bien que se presenta en cambios de conducta, de ánimo o afectos. Por: María Elena López
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ND003
En general, los niños sienten lo mismo que un adulto frente a una situación difícil.
Esto es tristeza, miedo, confusión, desorientación, soledad y temor al abandono.
Ello les crea inseguridad y angustia porque pueden llegar a pensar que si uno de sus padres se marchó, el otro también puede hacerlo, y se apegan de forma exagerada a uno de ellos.
También sienten inquietud y confusión frente a la posibilidad que sus padres lleguen a tener nuevas parejas.
Cuando esto sucede es preciso reforzar su autoestima, darles más afecto, demostrarles que siguen siendo importantes, que no van a ser desplazados.
Expresiones como: “Aunque no puedo vivir con tu madre (padre), ambos te queremos. Nada puede cambiar eso”, les da seguridad de que, por encima de todo, cuentan con el cariño de sus padres.
Los niños tienen momentos de esparcimiento en los que ríen, juegan y comparten con sus amigos. Esto le permite poner sus afectos y energía en otras personas y actividades.
Al igual que los adultos pueden tener ratos de pesimismo y perder temporalmente la fe en que la vida se normalice.
Pueden expresar cosas como “para que tanto esfuerzo si ya no hay nada que hacer”.
Al mismo tiempo crear escenas en su imaginación en las que idealizan un final feliz y pueden hacer preguntas como “cierto mami que papi va a volver y vamos a estar todos juntos otra vez”.
Por otra parte, es posible que durante el proceso, o después de la separación manifiesten cierto desprendimiento emocional que a simple vista pareciera indiferencia, o por el contrario podrían evidenciar un apego excesivo por miedo a un nuevo abandono.
Algunos pueden presentar trastornos del sueno (pesadillas, insomnio, terrores nocturnos o miedo a dormir solo), de alimentación (comer en exceso o dejar de comer), de los hábitos (perder el control de esfínteres, volver a chuparse el dedo u otras conductas que no corresponden a su edad).
Pueden desarrollar tics nerviosos o enfermarse con frecuencia (padecen fiebres, gripa o alergias), porque las defensas inmunológicas disminuyen debido a las tensiones.
Igualmente, es probable que se afecte su rendimiento escolar por la dificultad para prestar atención al cambio en sus hábitos de estudio.
Pueden mostrarse irritables o susceptibles con sus compañeros y profesores y tener problemas de adaptación escolar.
Es importante tener en cuenta que la forma en que expresan estas emociones no siempre es abierta y explicita, sino más bien que se presenta en cambios de conducta, de ánimo o afectos. Por: María Elena López
Divorcio y Escuela
El colegio y el divorcio .
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=CD001
La actividad escolar es el frente que con más facilidad canaliza y evidencia el conflicto interno que sufre el niño cuando sus padres pasan por un proceso de separación.
El niño permanece en el colegio una parte importante de su vida, además de tener que responder a unas exigencias sistemáticas tanto académicas como sociales.
Este es un aspecto que debe atenderse con dedicación y cuidado.
Igualmente, es probable que se afecte su rendimiento escolar por aspectos que van desde la dificultad para poner atención, los cambios de vivienda, las personas con las cuales viven, hasta las condiciones en las cuales el niño mantiene los hábitos de estudio.
Pueden mostrarse irritables y susceptibles con los compañeros y profesores, y tener problemas de adaptación escolar.
Permita que ellos prosigan con las actividades que habitualmente realizan con sus amigos o en el colegio.
Aunque enfrentarse en el colegio a la curiosidad de los compañeros no resulta fácil, también es cierto que muchas veces los niños obtienen ganancias secundarias de esta crisis.
Es importante estar en contacto con el plantel académico con el objeto de hacer un seguimiento al comportamiento del niño y así poder detectar a tiempo síntomas y reacciones propias de este proceso.
La mayoría de los planteles tienen un departamento de psicología al que se puede acudir.
Los profesores pueden ayudar a los niños a socializar este tema en el salón de clase, de manera que se sientan acogidos y comprendidos y tenga herramientas para compartirlo con sus compañeros o expresar con libertad los sentimientos que esta situación le genera.
Los padres deben, igualmente estar atentos para determinar cuando es necesario presionar un poco al niño para que siga asumiendo sus deberes escolares y cuando es preciso darle un compás de espera mientras se recupera.
Muchas veces es necesaria una ayuda extraescolar para que el niño logre nuevamente alcanzar niveles satisfactorios de desempeño.
Por: María Elena López
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=CD001
La actividad escolar es el frente que con más facilidad canaliza y evidencia el conflicto interno que sufre el niño cuando sus padres pasan por un proceso de separación.
El niño permanece en el colegio una parte importante de su vida, además de tener que responder a unas exigencias sistemáticas tanto académicas como sociales.
Este es un aspecto que debe atenderse con dedicación y cuidado.
Igualmente, es probable que se afecte su rendimiento escolar por aspectos que van desde la dificultad para poner atención, los cambios de vivienda, las personas con las cuales viven, hasta las condiciones en las cuales el niño mantiene los hábitos de estudio.
Pueden mostrarse irritables y susceptibles con los compañeros y profesores, y tener problemas de adaptación escolar.
Permita que ellos prosigan con las actividades que habitualmente realizan con sus amigos o en el colegio.
Aunque enfrentarse en el colegio a la curiosidad de los compañeros no resulta fácil, también es cierto que muchas veces los niños obtienen ganancias secundarias de esta crisis.
Es importante estar en contacto con el plantel académico con el objeto de hacer un seguimiento al comportamiento del niño y así poder detectar a tiempo síntomas y reacciones propias de este proceso.
La mayoría de los planteles tienen un departamento de psicología al que se puede acudir.
Los profesores pueden ayudar a los niños a socializar este tema en el salón de clase, de manera que se sientan acogidos y comprendidos y tenga herramientas para compartirlo con sus compañeros o expresar con libertad los sentimientos que esta situación le genera.
Los padres deben, igualmente estar atentos para determinar cuando es necesario presionar un poco al niño para que siga asumiendo sus deberes escolares y cuando es preciso darle un compás de espera mientras se recupera.
Muchas veces es necesaria una ayuda extraescolar para que el niño logre nuevamente alcanzar niveles satisfactorios de desempeño.
Por: María Elena López
Los Profesores frente al Divorcio
Los profesores y la nueva familia.
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=CD002
El cambio que el divorcio ha traído a la estructura de la familia de hoy, también afecta el trabajo del profesor en el aula de clase.
Hasta hace algunos años se enseñaba que ella estaba conformada por el padre, la madre y los hijos, que vivían en un mismo hogar.
La familia extensa estaba integrada por los tíos, primos y abuelos.
En la actualidad, muchos niños hacen parte de familias que viven en dos casas e incluyen otras personas.
Así, estas familias se forman por la unión de padres divorciados con sus respectivos hijos.
En ellas los lazos que les unen no son biológicos.
Sin embargo, requieren que los pequeños incorporen a cada uno de los nuevos miembros a su grupo familiar sin tener que excluir a ninguno de ellos.
El profesor es un elemento de gran importancia en este proceso. Él puede dentro del salón de clase ayudar a los niños a entender, aceptar y valorar el esquema al cual pertenecen ahora. Recordemos que el currículum escolar incluye el trabajo con la familia como reconocimiento y adaptación a la sociedad en la cual crece y se desarrolla el individuo.
Después del divorcio los hijos se ven enfrentados a modificar la estructura de su familia a una que está conformada por los mismos miembros pero que ahora viven en dos casas.
Para ellos es difícil entender este nuevo esquema y tienden a creer que su familia se ha destruido con la separación.
Deberán aceptar frente a sí mismos y a sus compañeros el que ahora pertenecen a un grupo diferente. Además deberán prepararse para permitir que nuevas personas entren a formar parte de su familia, si sus padres se casan de nuevo.
Para llevar a cabo su tarea, el profesor debe aceptar primero que el divorcio no destruye la familia sino que la transforma.
Cuando esto se logra, también puede hacer sentir orgullosos a los niños por su familia. Recordemos que en un principio ellos sienten vergüenza de su nueva situación y quisieran poder modificarla.
No saben como será la vida ahora y temen que sus padres los dejen de querer y se alejen.
Es importante que les ayudemos a comprender que aunque la relación de pareja entre ellos haya terminado, continuarán unidos como padres por el resto de la vida.
Es fundamental permitirles expresar la transformación a través de sus historias, dibujos y representaciones. Cada uno tiene su propio ritmo y eso hay que respetarlo.
En el salón de clase el profesor puede apoyar al niño a adaptarse a su nueva vida, trabajando los aspectos siguientes:
- La familia corresponde a un grupo de personas a las que les une un afecto especial y único. Este no depende del lugar donde viven y por lo tanto se mantiene aún cuando los padres deciden vivir en casas separadas.
- El divorcio no destruye la familia, la transforma. El niño continúa siendo parte de UNA familia que vive en DOS casas.
- Existen vínculos biológicos entre los miembros de la familia. También se desarrollan otros lazos afectivos con personas que no comparten los biológicos. Es posible aceptarlos e incluirlos a todos dentro de la estructura familiar.
- Encontrar palabras amables con las que los menores puedan identificar a cada una de las personas de su familia para que pueda referirse a ellos con respeto y afecto.
- Trabajar los estereotipos culturales que existen alrededor de la madrastra, el padrastro y los hermanastros le ayuda al niño a modificar el concepto negativo que pueda tener sobre las personas que están ocupando ese lugar en su vida.
Por: Gloria Mercedes Isaza
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=CD002
El cambio que el divorcio ha traído a la estructura de la familia de hoy, también afecta el trabajo del profesor en el aula de clase.
Hasta hace algunos años se enseñaba que ella estaba conformada por el padre, la madre y los hijos, que vivían en un mismo hogar.
La familia extensa estaba integrada por los tíos, primos y abuelos.
En la actualidad, muchos niños hacen parte de familias que viven en dos casas e incluyen otras personas.
Así, estas familias se forman por la unión de padres divorciados con sus respectivos hijos.
En ellas los lazos que les unen no son biológicos.
Sin embargo, requieren que los pequeños incorporen a cada uno de los nuevos miembros a su grupo familiar sin tener que excluir a ninguno de ellos.
El profesor es un elemento de gran importancia en este proceso. Él puede dentro del salón de clase ayudar a los niños a entender, aceptar y valorar el esquema al cual pertenecen ahora. Recordemos que el currículum escolar incluye el trabajo con la familia como reconocimiento y adaptación a la sociedad en la cual crece y se desarrolla el individuo.
Después del divorcio los hijos se ven enfrentados a modificar la estructura de su familia a una que está conformada por los mismos miembros pero que ahora viven en dos casas.
Para ellos es difícil entender este nuevo esquema y tienden a creer que su familia se ha destruido con la separación.
Deberán aceptar frente a sí mismos y a sus compañeros el que ahora pertenecen a un grupo diferente. Además deberán prepararse para permitir que nuevas personas entren a formar parte de su familia, si sus padres se casan de nuevo.
Para llevar a cabo su tarea, el profesor debe aceptar primero que el divorcio no destruye la familia sino que la transforma.
Cuando esto se logra, también puede hacer sentir orgullosos a los niños por su familia. Recordemos que en un principio ellos sienten vergüenza de su nueva situación y quisieran poder modificarla.
No saben como será la vida ahora y temen que sus padres los dejen de querer y se alejen.
Es importante que les ayudemos a comprender que aunque la relación de pareja entre ellos haya terminado, continuarán unidos como padres por el resto de la vida.
Es fundamental permitirles expresar la transformación a través de sus historias, dibujos y representaciones. Cada uno tiene su propio ritmo y eso hay que respetarlo.
En el salón de clase el profesor puede apoyar al niño a adaptarse a su nueva vida, trabajando los aspectos siguientes:
- La familia corresponde a un grupo de personas a las que les une un afecto especial y único. Este no depende del lugar donde viven y por lo tanto se mantiene aún cuando los padres deciden vivir en casas separadas.
- El divorcio no destruye la familia, la transforma. El niño continúa siendo parte de UNA familia que vive en DOS casas.
- Existen vínculos biológicos entre los miembros de la familia. También se desarrollan otros lazos afectivos con personas que no comparten los biológicos. Es posible aceptarlos e incluirlos a todos dentro de la estructura familiar.
- Encontrar palabras amables con las que los menores puedan identificar a cada una de las personas de su familia para que pueda referirse a ellos con respeto y afecto.
- Trabajar los estereotipos culturales que existen alrededor de la madrastra, el padrastro y los hermanastros le ayuda al niño a modificar el concepto negativo que pueda tener sobre las personas que están ocupando ese lugar en su vida.
Por: Gloria Mercedes Isaza
Padres trás el Divorcio ??????
Mensaje para los padres.
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=PD214
Si usted ha tomado la decisión de separarse, o ha estado separado por algún tiempo, puede encontrar útiles las siguientes recomendaciones:
1. Sus hijos constituyen lo primero. El amor que sienten ambos padres por ellos les permite evaluar cuál es la mejor opción. Recuerde que estos no deben convertirse en un arma para pelear y obtener beneficios de la situación. Los pequeños aprenden lo importantes que son para sus padres a través de las decisiones que ellos toman. Deben comprender que a pesar de existir muchas diferencias entre sí, tienen un gran objetivo común: los hijos.
2. Hagan todos los esfuerzos que se requieran para seguir unidos como padres y mantener una comunicación amable. Es muy importante que ambos continúen siendo cordiales entre sí, especialmente delante de sus hijos. No es indispensable mantener el vínculo amoroso, simplemente se trata de construir una relación respetuosa, pacífica y cooperativa. Recuerde que el amor que los padres sienten por sus hijos es el lazo que los mantendrá unidos por el resto de su vida. Este, debe ser la fuerza que les permita ser amables con su ex en los momentos de encuentro, en los que un simple saludo y un cómo estás, pueden hacer la diferencia. Nunca los utilice como medio para vengarse de lo sucedido durante el matrimonio.
3. No hable mal de su expareja. Controle su rabia y no ataque al otro en lo que ha sido su forma de ser y ejercer la paternidad. Parece increíble que hablar mal del otro progenitor hace que sus hijos pierdan el respeto y admiración que sienten por usted. También, esto obliga a los menores a asumir una posición en la cual alguno de los dos progenitores pierde. Es importante ponerse en la situación de los hijos, y entender el dolor que experimentan frente a la hostilidad entre sus padres.
4. No permita que sus hijos queden en medio de las dificultades que tiene con su expareja. No les asigne ninguno de los siguientes roles: mensajeros de información, espías de las actividades y amistades de su ex, asesores financieros que deben conseguir el dinero, terapeutas que le entienden y consuelan su dolor, mendigos que deben pedir sus necesidades sean cubiertas por su ex, jueces capaces de sentenciar al culpable de lo que están viviendo. Esto los convierte en mediadores de la situación. Mantenga sus diferencias y dificultades lejos de los pequeños, ellos no deben participar de ellas. Los acuerdos y las discusiones deben ocurrir en su ausencia, para evitar que escuchen las disputas y se sientan culpables por ellas.
5. Recuerde que es importante decir a los hijos en todo momento, incluso después del divorcio, que no son responsables del divorcio, que esta es una decisión que ustedes los adultos han tomado. Muchos niños se sienten culpables de lo sucedido, y piensan que fue su comportamiento el que ocasionó la separación.
6. Permanezca cerca de la vida de sus hijos. No pretenda hacer creer que las circunstancias no han cambiado. Sin embargo, tenga la certeza en que con esfuerzo y dedicación es posible mantener una relación cercana con ellos. Establezca un horario de visitas que permita que ambos padres compartan la mayor cantidad de tiempo con los pequeños. Comuníquese permanentemente con los menores y siga siendo parte de su vida. El hecho de vivir en casas separadas no significa que ahora tengan menos responsabilidades como padres. Ambos deben continuar ejerciendo su labor de guía y formación. Recuerde que existen exparejas pero no expapás.
7. Mantenga el diálogo con sus hijos. Permítales participar de su vida, conocer sus actividades e intereses. Hable con ellos y esté siempre dispuesto a contestar sus preguntas. Dígales siempre la verdad de lo que está sucediendo, aún cuando tema la forma en la que podrían reaccionar. Sea cariñoso, demuéstreles su afecto a través del contacto físico y expréseles permanentemente cuánto los quiere y lo significativos que son en su vida.
8. Recuerde que la comunicación diaria es indispensable para mantener una relación cercana. Si le es posible, trate de vivir cerca de sus hijos. La proximidad física de las dos casas facilita los encuentros con ambos padres. Además hace que la experiencia del traslado sea más fácil para los pequeños.
9. Acuerde las condiciones para estar juntos y trate de que estas sean constantes. Los niños se sienten más seguros cuando saben el tiempo y lugar que compartirán con cada padre. Conocer con anterioridad los días y horas que pasarán con cada progenitor les permite prepararse para los cambios y aceptarlos con tranquilidad.
Esto no significa que se deban eliminar los encuentros espontáneos. La flexibilidad de los padres es indispensable para que estos se vivan en forma tranquila y natural.
Es indudable que cada casa funciona con normas diferentes y el niño debe aprender a vivir con ambas.
10. Viva el dolor que conlleva la separación. La mejor manera de poder apoyar a sus hijos en este proceso es superarlo, aceptando las pérdidas y fortaleciendo las ganancias. Si lo necesita, busque la ayuda de un terapeuta que le acompañe durante este tiempo.
Por: Gloria Mercedes Isaza
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=PD214
Si usted ha tomado la decisión de separarse, o ha estado separado por algún tiempo, puede encontrar útiles las siguientes recomendaciones:
1. Sus hijos constituyen lo primero. El amor que sienten ambos padres por ellos les permite evaluar cuál es la mejor opción. Recuerde que estos no deben convertirse en un arma para pelear y obtener beneficios de la situación. Los pequeños aprenden lo importantes que son para sus padres a través de las decisiones que ellos toman. Deben comprender que a pesar de existir muchas diferencias entre sí, tienen un gran objetivo común: los hijos.
2. Hagan todos los esfuerzos que se requieran para seguir unidos como padres y mantener una comunicación amable. Es muy importante que ambos continúen siendo cordiales entre sí, especialmente delante de sus hijos. No es indispensable mantener el vínculo amoroso, simplemente se trata de construir una relación respetuosa, pacífica y cooperativa. Recuerde que el amor que los padres sienten por sus hijos es el lazo que los mantendrá unidos por el resto de su vida. Este, debe ser la fuerza que les permita ser amables con su ex en los momentos de encuentro, en los que un simple saludo y un cómo estás, pueden hacer la diferencia. Nunca los utilice como medio para vengarse de lo sucedido durante el matrimonio.
3. No hable mal de su expareja. Controle su rabia y no ataque al otro en lo que ha sido su forma de ser y ejercer la paternidad. Parece increíble que hablar mal del otro progenitor hace que sus hijos pierdan el respeto y admiración que sienten por usted. También, esto obliga a los menores a asumir una posición en la cual alguno de los dos progenitores pierde. Es importante ponerse en la situación de los hijos, y entender el dolor que experimentan frente a la hostilidad entre sus padres.
4. No permita que sus hijos queden en medio de las dificultades que tiene con su expareja. No les asigne ninguno de los siguientes roles: mensajeros de información, espías de las actividades y amistades de su ex, asesores financieros que deben conseguir el dinero, terapeutas que le entienden y consuelan su dolor, mendigos que deben pedir sus necesidades sean cubiertas por su ex, jueces capaces de sentenciar al culpable de lo que están viviendo. Esto los convierte en mediadores de la situación. Mantenga sus diferencias y dificultades lejos de los pequeños, ellos no deben participar de ellas. Los acuerdos y las discusiones deben ocurrir en su ausencia, para evitar que escuchen las disputas y se sientan culpables por ellas.
5. Recuerde que es importante decir a los hijos en todo momento, incluso después del divorcio, que no son responsables del divorcio, que esta es una decisión que ustedes los adultos han tomado. Muchos niños se sienten culpables de lo sucedido, y piensan que fue su comportamiento el que ocasionó la separación.
6. Permanezca cerca de la vida de sus hijos. No pretenda hacer creer que las circunstancias no han cambiado. Sin embargo, tenga la certeza en que con esfuerzo y dedicación es posible mantener una relación cercana con ellos. Establezca un horario de visitas que permita que ambos padres compartan la mayor cantidad de tiempo con los pequeños. Comuníquese permanentemente con los menores y siga siendo parte de su vida. El hecho de vivir en casas separadas no significa que ahora tengan menos responsabilidades como padres. Ambos deben continuar ejerciendo su labor de guía y formación. Recuerde que existen exparejas pero no expapás.
7. Mantenga el diálogo con sus hijos. Permítales participar de su vida, conocer sus actividades e intereses. Hable con ellos y esté siempre dispuesto a contestar sus preguntas. Dígales siempre la verdad de lo que está sucediendo, aún cuando tema la forma en la que podrían reaccionar. Sea cariñoso, demuéstreles su afecto a través del contacto físico y expréseles permanentemente cuánto los quiere y lo significativos que son en su vida.
8. Recuerde que la comunicación diaria es indispensable para mantener una relación cercana. Si le es posible, trate de vivir cerca de sus hijos. La proximidad física de las dos casas facilita los encuentros con ambos padres. Además hace que la experiencia del traslado sea más fácil para los pequeños.
9. Acuerde las condiciones para estar juntos y trate de que estas sean constantes. Los niños se sienten más seguros cuando saben el tiempo y lugar que compartirán con cada padre. Conocer con anterioridad los días y horas que pasarán con cada progenitor les permite prepararse para los cambios y aceptarlos con tranquilidad.
Esto no significa que se deban eliminar los encuentros espontáneos. La flexibilidad de los padres es indispensable para que estos se vivan en forma tranquila y natural.
Es indudable que cada casa funciona con normas diferentes y el niño debe aprender a vivir con ambas.
10. Viva el dolor que conlleva la separación. La mejor manera de poder apoyar a sus hijos en este proceso es superarlo, aceptando las pérdidas y fortaleciendo las ganancias. Si lo necesita, busque la ayuda de un terapeuta que le acompañe durante este tiempo.
Por: Gloria Mercedes Isaza
Papá despues del Divorcio
Papá despues del divorcio.
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ED101
La relación que con mayor frecuencia se ve afectada en el divorcio, es la del padre con su hijo, ya que generalmente corresponde al que sale de casa.
No vivir juntos limita el tiempo que comparten, y priva a los dos de poder participar de las experiencias diarias.
Los papás deben hacer esfuerzos para mantener una relación cercana con este después de la separación.
Ambos padres, y en especial el progenitor que se aleja, deben comprender que su pequeño requiere de su presencia, y que privarlo de ella le produce inseguridad.
Así mismo, tener muy presente que la forma como se expresan del otro delante de él, influye en la relación que construye con cada uno.
Deben reconocer que un manejo inadecuado de estas situaciones también trae consecuencias negativas en el futuro desempeño del hijo como adulto.
Ha sido usual en nuestra cultura que las madres sean las que comparten más tiempo con los hijos y les presten mayor apoyo.
Hasta hace poco tiempo los hombres se involucraban menos en la crianza de los niños, y su responsabilidad se limitaba a proveer los recursos económicos para su crecimiento y educación.
Pero la realidad ha cambiado y hoy ellos son tan importantes como las mujeres en el crecimiento del pequeño. Cuando se vive la separación es definitivo para el menor que su papá permanezca presente y continúe con los compromisos de ser padre.
No ponemos en duda que para un padre divorciado es difícil participar en la vida diaria de su hijo cuando solo lo ve unos pocos días del mes.
Así, compensar la ausencia no resulta posible. La experiencia ha demostrado que es factible para él continuar teniendo una relación cercana con este a pesar de que no viva a su lado.
El amor puede descubrir alternativas para mantener el contacto constante entre ambos, y poder seguir involucrado en su vida.
Se requiere que los dos miembros de la expareja sean cooperativos y respetuosos entre sí, hay que repetirlo.
La ayuda mutua será de gran beneficio para todos, y el hijo la verá como un hecho positivo que la da seguridad.
Cuando el padre y la madre continúan los conflictos después del divorcio, la relación entre el papá y su hijo tiende a deteriorarse. Esto sucede si el pequeño queda atrapado en medio de la batalla y se ve obligado a apoyar a su progenitora con quien comparte la mayor parte del tiempo.
También, en el momento en que el padre establece una nueva relación de pareja, y él debe compartir la estadía en casa de su padre con una persona extraña.
Investigaciones recientes han demostrado que cuando la relación con el padre se deteriora, los niños experimentan primero tristeza y luego rabia.
Así mismo, se muestra que en muchos casos los pequeños superan estos sentimientos eliminando tan importante figura de su vida.
Por: Gloria Mercedes Isaza
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ED101
La relación que con mayor frecuencia se ve afectada en el divorcio, es la del padre con su hijo, ya que generalmente corresponde al que sale de casa.
No vivir juntos limita el tiempo que comparten, y priva a los dos de poder participar de las experiencias diarias.
Los papás deben hacer esfuerzos para mantener una relación cercana con este después de la separación.
Ambos padres, y en especial el progenitor que se aleja, deben comprender que su pequeño requiere de su presencia, y que privarlo de ella le produce inseguridad.
Así mismo, tener muy presente que la forma como se expresan del otro delante de él, influye en la relación que construye con cada uno.
Deben reconocer que un manejo inadecuado de estas situaciones también trae consecuencias negativas en el futuro desempeño del hijo como adulto.
Ha sido usual en nuestra cultura que las madres sean las que comparten más tiempo con los hijos y les presten mayor apoyo.
Hasta hace poco tiempo los hombres se involucraban menos en la crianza de los niños, y su responsabilidad se limitaba a proveer los recursos económicos para su crecimiento y educación.
Pero la realidad ha cambiado y hoy ellos son tan importantes como las mujeres en el crecimiento del pequeño. Cuando se vive la separación es definitivo para el menor que su papá permanezca presente y continúe con los compromisos de ser padre.
No ponemos en duda que para un padre divorciado es difícil participar en la vida diaria de su hijo cuando solo lo ve unos pocos días del mes.
Así, compensar la ausencia no resulta posible. La experiencia ha demostrado que es factible para él continuar teniendo una relación cercana con este a pesar de que no viva a su lado.
El amor puede descubrir alternativas para mantener el contacto constante entre ambos, y poder seguir involucrado en su vida.
Se requiere que los dos miembros de la expareja sean cooperativos y respetuosos entre sí, hay que repetirlo.
La ayuda mutua será de gran beneficio para todos, y el hijo la verá como un hecho positivo que la da seguridad.
Cuando el padre y la madre continúan los conflictos después del divorcio, la relación entre el papá y su hijo tiende a deteriorarse. Esto sucede si el pequeño queda atrapado en medio de la batalla y se ve obligado a apoyar a su progenitora con quien comparte la mayor parte del tiempo.
También, en el momento en que el padre establece una nueva relación de pareja, y él debe compartir la estadía en casa de su padre con una persona extraña.
Investigaciones recientes han demostrado que cuando la relación con el padre se deteriora, los niños experimentan primero tristeza y luego rabia.
Así mismo, se muestra que en muchos casos los pequeños superan estos sentimientos eliminando tan importante figura de su vida.
Por: Gloria Mercedes Isaza
Efectos de la Ruptura de la pareja en los Niños
Que sienten los niños por el padre que se va.
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ED001
Cuando uno de los padres se va de la casa, los niños experimentan sentimientos que van desde la nostalgia porque ya no pueden compartir con ellos la vida cotidiana, hasta preocupación por el bienestar y estado general del que se ausenta.
Esto genera un duelo corto o largo, intenso o leve dependiendo de muchos factores.
Los pequeños sienten ese alejamiento al comprender que ya no van a vivir en la misma casa y que hay ciertas restricciones para compartir el tiempo con él.
El proceso del divorcio tiene gran impacto para los menores, pues los padres representan la seguridad y el cuidado que necesitan para su desarrollo.
El hecho de que uno de sus padres se vaya puede ser sentido como un abandono por parte de ellos o también dadas las circunstancias específicas del proceso, los niños pueden llegar a experimentar responsabilidad por el bienestar de uno de los padres.
Muchas veces se sienten envueltos en conflictos de lealtades por no acompañar al padre que, disfrutar sin su compañía o tener comodidades que este no tiene o que los niños en su lógica infantil creen.
No siempre los niños tienen claridad sobre el tipo de sentimiento que experimentan.
Aunque no exprese abiertamente tristeza es posible que no hablar como usualmente lo hace, estar muy irritable o negarse a salir, sea una forma de vivenciar el abatimiento; los niños actúan en su comportamiento sus emociones mas profundas de manera muchas veces, diferente a la de los adultos.
Es importante que estos hablen con sus hijos antes y después del divorcio y les expliquen de forma clara (cuando están pequeños los ejemplos son una valiosa ayuda) que aunque uno de los padres no viva en la misma casa, no significa que no vaya a estar atento a sus necesidades.
Para los niños resulta muy beneficioso que el padre con el que viven facilite el diálogo con el otro. Este puede ayudarles para propiciar los encuentros, definir las citas, acordar los tiempos que pasarán juntos.
Por: María Elena López
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ED001
Cuando uno de los padres se va de la casa, los niños experimentan sentimientos que van desde la nostalgia porque ya no pueden compartir con ellos la vida cotidiana, hasta preocupación por el bienestar y estado general del que se ausenta.
Esto genera un duelo corto o largo, intenso o leve dependiendo de muchos factores.
Los pequeños sienten ese alejamiento al comprender que ya no van a vivir en la misma casa y que hay ciertas restricciones para compartir el tiempo con él.
El proceso del divorcio tiene gran impacto para los menores, pues los padres representan la seguridad y el cuidado que necesitan para su desarrollo.
El hecho de que uno de sus padres se vaya puede ser sentido como un abandono por parte de ellos o también dadas las circunstancias específicas del proceso, los niños pueden llegar a experimentar responsabilidad por el bienestar de uno de los padres.
Muchas veces se sienten envueltos en conflictos de lealtades por no acompañar al padre que, disfrutar sin su compañía o tener comodidades que este no tiene o que los niños en su lógica infantil creen.
No siempre los niños tienen claridad sobre el tipo de sentimiento que experimentan.
Aunque no exprese abiertamente tristeza es posible que no hablar como usualmente lo hace, estar muy irritable o negarse a salir, sea una forma de vivenciar el abatimiento; los niños actúan en su comportamiento sus emociones mas profundas de manera muchas veces, diferente a la de los adultos.
Es importante que estos hablen con sus hijos antes y después del divorcio y les expliquen de forma clara (cuando están pequeños los ejemplos son una valiosa ayuda) que aunque uno de los padres no viva en la misma casa, no significa que no vaya a estar atento a sus necesidades.
Para los niños resulta muy beneficioso que el padre con el que viven facilite el diálogo con el otro. Este puede ayudarles para propiciar los encuentros, definir las citas, acordar los tiempos que pasarán juntos.
Por: María Elena López
10 Reglas para los Padres Divorciados
Diez reglas para papás divorciados .
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ED107&PHPSESSID=de563296f4a83cca896595e5cfac64f7
El momento de la separación significa para el padre que sale de casa el comienzo de una nueva etapa en su vida como progenitor.
Este, deberá adaptarse a los cambios y especialmente al tiempo que tendrá para compartir con sus hijos.
Para ajustarse a su nueva realidad le ayudará el tener en cuenta los aspectos siguientes:
1. Aproveche al máximo los encuentros con sus hijos. Establezca los horarios de convivencia y las temporadas de vacaciones que permanecerá con ellos. El cumplimiento de las fechas y horas establecidas da seguridad a los niños y les permite programar sus propias actividades. No olvide que ellos necesitan prepararse para los cambios.
2. ¡No deje de ser el padre de sus hijos! Después de la separación muchos hombres se convierten en papás exclusivamente complacientes con ellos y olvidan la responsabilidad que tienen como formadores. Es frecuente escucharlos decir: “comparto poco tiempo con los niños y deseo que nuestros encuentros sean placenteros; no voy a dedicar ese espacio a corregirlos y disciplinarlos; quiero que deseen estar conmigo”. Esta posición desestabiliza a los hijos y genera dificultades con el padre que mantiene la custodia. Tenga siempre presente que al disciplinar y corregir a sus pequeños usted les está trasmitiendo un mensaje de orientación y por lo tanto de amor.
3. Establezca las normas que regirán cuando están juntos. Lo niños deben aprender a vivir en casa del padre con las reglas que él establece. Recuerde que ellos no son huéspedes del lugar, sino pequeños que necesitan sentir que pertenecen a él. En los casos en que hay una nueva pareja ambos deben definir cuáles son las normas que hay que respetar durante las visitas. Tenga en cuenta que el caos y la improvisación generan inseguridad y baja autoestima en los niños.
4. Es importante crear un hogar estructurado que genere seguridad y pertenencia en los niños. Esto los ayuda a saber lo que deben hacer cuando están en casa. No importa si las exigencias son diferentes a las de la casa materna. Lo que se pretende es que poco a poco los niños se sientan parte de un grupo familiar sólido donde los padres son el soporte. Los niños desarrollan su autoestima cuando han contribuido con su trabajo a formar un equipo con su familia.
5. Ayude a sus hijos a desarrollar el respeto hacia usted y hacia sí mismos. Para lograrlo, debe generar en ellos expectativas reales sobre lo que serán las visitas. Tener normas claras y rituales especiales les hará sentirse seguros y mantener los lazos afectivos.
6. Recuerde que usted es el padre y el guía de su grupo familiar, el modelo de la figura masculina para sus hijos. Ellos aprenderán de usted la forma como un hombre debe comportarse en sus papeles de pareja y de padre. Este modelo será definitivo en su futuro desempeño como adultos.
7. El dinero puede ser un aspecto que genere tensión entre usted y sus niños. Para algunos padres separados es difícil decir NO a las peticiones económicas de sus hijos. Estos sienten que darles gusto es una buena forma de compensar su ausencia y de demostrarles su amor. Es importante recordar que los niños también necesitan papás que no les den todo lo que piden.
8. Acepte que la culpa es un sentimiento que está presente en algunas de sus decisiones. Muchos hombres se sienten culpables por el divorcio, por haber perdido su lugar en la familia y haberse convertido en padres de tiempo parcial para sus hijos.
9. Si ya tiene una nueva pareja construya con ella un frente unido ante a sus hijos. El trabajo en equipo es indispensable en la creación del naciente hogar. Evite que estos estén presentes en sus discordias y peleas. Póngase en el lugar de su compañera y trate de entender los cambios que la actual unión genera.
10. Usted y su nueva pareja son los encargados de definir las normas de disciplina de la casa. Los hijos deben aceptarlas cuando están en ella. Muchos niños las cuestionan poniendo de ejemplo las que existen en el otro hogar. En este caso, es importante ayudarles a entender que ambas casas son diferentes y ellos deben respetar los dos lugares de la misma manera.
Cuando afirmamos “en esta casa nosotros…” evitaremos que los pequeños manipulen la situación diciendo: “Tú no eres mi mamá; no puedes decirme lo que debo hacer.”
Por: Gloria Mercedes Isaza
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ED107&PHPSESSID=de563296f4a83cca896595e5cfac64f7
El momento de la separación significa para el padre que sale de casa el comienzo de una nueva etapa en su vida como progenitor.
Este, deberá adaptarse a los cambios y especialmente al tiempo que tendrá para compartir con sus hijos.
Para ajustarse a su nueva realidad le ayudará el tener en cuenta los aspectos siguientes:
1. Aproveche al máximo los encuentros con sus hijos. Establezca los horarios de convivencia y las temporadas de vacaciones que permanecerá con ellos. El cumplimiento de las fechas y horas establecidas da seguridad a los niños y les permite programar sus propias actividades. No olvide que ellos necesitan prepararse para los cambios.
2. ¡No deje de ser el padre de sus hijos! Después de la separación muchos hombres se convierten en papás exclusivamente complacientes con ellos y olvidan la responsabilidad que tienen como formadores. Es frecuente escucharlos decir: “comparto poco tiempo con los niños y deseo que nuestros encuentros sean placenteros; no voy a dedicar ese espacio a corregirlos y disciplinarlos; quiero que deseen estar conmigo”. Esta posición desestabiliza a los hijos y genera dificultades con el padre que mantiene la custodia. Tenga siempre presente que al disciplinar y corregir a sus pequeños usted les está trasmitiendo un mensaje de orientación y por lo tanto de amor.
3. Establezca las normas que regirán cuando están juntos. Lo niños deben aprender a vivir en casa del padre con las reglas que él establece. Recuerde que ellos no son huéspedes del lugar, sino pequeños que necesitan sentir que pertenecen a él. En los casos en que hay una nueva pareja ambos deben definir cuáles son las normas que hay que respetar durante las visitas. Tenga en cuenta que el caos y la improvisación generan inseguridad y baja autoestima en los niños.
4. Es importante crear un hogar estructurado que genere seguridad y pertenencia en los niños. Esto los ayuda a saber lo que deben hacer cuando están en casa. No importa si las exigencias son diferentes a las de la casa materna. Lo que se pretende es que poco a poco los niños se sientan parte de un grupo familiar sólido donde los padres son el soporte. Los niños desarrollan su autoestima cuando han contribuido con su trabajo a formar un equipo con su familia.
5. Ayude a sus hijos a desarrollar el respeto hacia usted y hacia sí mismos. Para lograrlo, debe generar en ellos expectativas reales sobre lo que serán las visitas. Tener normas claras y rituales especiales les hará sentirse seguros y mantener los lazos afectivos.
6. Recuerde que usted es el padre y el guía de su grupo familiar, el modelo de la figura masculina para sus hijos. Ellos aprenderán de usted la forma como un hombre debe comportarse en sus papeles de pareja y de padre. Este modelo será definitivo en su futuro desempeño como adultos.
7. El dinero puede ser un aspecto que genere tensión entre usted y sus niños. Para algunos padres separados es difícil decir NO a las peticiones económicas de sus hijos. Estos sienten que darles gusto es una buena forma de compensar su ausencia y de demostrarles su amor. Es importante recordar que los niños también necesitan papás que no les den todo lo que piden.
8. Acepte que la culpa es un sentimiento que está presente en algunas de sus decisiones. Muchos hombres se sienten culpables por el divorcio, por haber perdido su lugar en la familia y haberse convertido en padres de tiempo parcial para sus hijos.
9. Si ya tiene una nueva pareja construya con ella un frente unido ante a sus hijos. El trabajo en equipo es indispensable en la creación del naciente hogar. Evite que estos estén presentes en sus discordias y peleas. Póngase en el lugar de su compañera y trate de entender los cambios que la actual unión genera.
10. Usted y su nueva pareja son los encargados de definir las normas de disciplina de la casa. Los hijos deben aceptarlas cuando están en ella. Muchos niños las cuestionan poniendo de ejemplo las que existen en el otro hogar. En este caso, es importante ayudarles a entender que ambas casas son diferentes y ellos deben respetar los dos lugares de la misma manera.
Cuando afirmamos “en esta casa nosotros…” evitaremos que los pequeños manipulen la situación diciendo: “Tú no eres mi mamá; no puedes decirme lo que debo hacer.”
Por: Gloria Mercedes Isaza
En Defensa de la Custodia Compartida I
En defensa de la custodia compartida
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ED304
Muchas personas aconsejan la custodia compartida porque les ofrece a los niños la oportunidad de gozar de la compañía de ambos padres, tener dos modelos y sentirse amados por los dos.
Así se verán fortalecidos pues obtendrán elementos que les ayudarán a ser unos individuos cabales.
Según este planteamiento, las únicas condiciones bajo las cuales la custodia debe ser para un solo progenitor son aquellas que ponen en peligro la integridad de los niños como abuso, alcoholismo, la falta de trabajo, problemas mentales, etc.
La custodia compartida debe ser acordada teniendo en cuenta las necesidades de los menores, principal interés, y no una competencia de poder entre los padres.
Los niños no son un trofeo que gana uno de ellos.
Como padres, ambos están en la obligación de velar por el bienestar de los hijos y deben dejar sus diferencias a un lado y cooperar para asegurar que tengan lo que necesitan para desarrollarse.
La manera como puede acordarse y ajustarse a la realidad la decisión de la custodia compartida esta relacionada con aspectos como la edad de los hijos, su personalidad y también la condición y circunstancias de los padres.
Cuando los niños están pequeños, los períodos de tiempo que pasan con cada uno deben ser cortos. Después podría pensarse en mayor duración.
Los menores extrañan al padre con el que viven, pueden sentir pena por él o miedo de que algo le suceda.
Con los más grandecitos pueden establecerse acuerdos teniendo en cuenta sus propias condiciones y comodidades, por ejemplo que tan fácil le resulte coordinar todas sus rutinas escolares, hacer sus deberes escolares.
Tenga en cuenta:
-Que el niño sepa que puede establecer contacto con él padre con el que no está, de manera pronta y fácil
-Mantener la comunicación y la cordialidad entre los padres.Esto permitirá manejar con mayor organización y eficacia los tiempos de cada uno
-Seguir los acuerdos frente a las reglas. De esta manera el niño sabrá que se espera de él
-Tener flexibilidad para enfrentar los imprevistos que se presenten fundamentales
- Facilitar la logística necesaria para que estar un tiempo en una casa y en otra no resulte especialmente fatigante o le interfiera con sus rutinas básicas
Por: María Elena López
http://www.nosdivorciamos.com/articulo.php?id=ED304
Muchas personas aconsejan la custodia compartida porque les ofrece a los niños la oportunidad de gozar de la compañía de ambos padres, tener dos modelos y sentirse amados por los dos.
Así se verán fortalecidos pues obtendrán elementos que les ayudarán a ser unos individuos cabales.
Según este planteamiento, las únicas condiciones bajo las cuales la custodia debe ser para un solo progenitor son aquellas que ponen en peligro la integridad de los niños como abuso, alcoholismo, la falta de trabajo, problemas mentales, etc.
La custodia compartida debe ser acordada teniendo en cuenta las necesidades de los menores, principal interés, y no una competencia de poder entre los padres.
Los niños no son un trofeo que gana uno de ellos.
Como padres, ambos están en la obligación de velar por el bienestar de los hijos y deben dejar sus diferencias a un lado y cooperar para asegurar que tengan lo que necesitan para desarrollarse.
La manera como puede acordarse y ajustarse a la realidad la decisión de la custodia compartida esta relacionada con aspectos como la edad de los hijos, su personalidad y también la condición y circunstancias de los padres.
Cuando los niños están pequeños, los períodos de tiempo que pasan con cada uno deben ser cortos. Después podría pensarse en mayor duración.
Los menores extrañan al padre con el que viven, pueden sentir pena por él o miedo de que algo le suceda.
Con los más grandecitos pueden establecerse acuerdos teniendo en cuenta sus propias condiciones y comodidades, por ejemplo que tan fácil le resulte coordinar todas sus rutinas escolares, hacer sus deberes escolares.
Tenga en cuenta:
-Que el niño sepa que puede establecer contacto con él padre con el que no está, de manera pronta y fácil
-Mantener la comunicación y la cordialidad entre los padres.Esto permitirá manejar con mayor organización y eficacia los tiempos de cada uno
-Seguir los acuerdos frente a las reglas. De esta manera el niño sabrá que se espera de él
-Tener flexibilidad para enfrentar los imprevistos que se presenten fundamentales
- Facilitar la logística necesaria para que estar un tiempo en una casa y en otra no resulte especialmente fatigante o le interfiera con sus rutinas básicas
Por: María Elena López
jueves, 4 de octubre de 2007
¿ A donde nos llevará esta Locura ?
Recogido en: http://www.redfeminista.org/Noticia.asp?ID=5539
La Audiencia de Valladolid considera que el impago de pensiones es violencia machista
03/10/2007.
En la ciudad, se denuncian seis casos diarios por incumplir este deber familiar que «vulnera el derecho de la mujer».
J. MORENO / El Norte de Castilla
La Audiencia Provincial de Valladolid acordó el pasado mes de junio, frente del criterio de la mayor parte de las audiencias de España, que el impago de pensiones en una pareja separada debe considerarse como un supuesto de violencia de género, por lo que atribuye la resolución de cuantos casos de conflictividad se generen al nuevo Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Valladolid.(.....)
El acuerdo adoptado en la reunión del 26 de junio por los magistrados de las dos secciones de lo Penal de la Audiencia vallisoletana supone que la resolución de las diferencias por la falta de pago de las pensiones de los hijos pasan de dejar de ser competencia de los jueces de Primera Instancia y Familia.
Según la Audiencia de Valladolid, que junto con la de Pontevedra es la única que se ha pronunciado en este supuesto:
1.- «la Ley Orgánica del Poder Judicial no exige que la mujer y los hijos hayan sufrido actos de violencia previa», por lo que debe ser el nuevo órgano judicial creado el encargado de dirimir estos litigios.
2.- «Tampoco exige que haya violencia psíquica o física previa. La dejación del cumplimiento de deberes familiares supone un acto de violencia machista, al vulnerar los derechos de la mujer y de los menores en el ámbito familiar», dice la resolución de unificación de doctrina de la Audiencia de Valladolid,.....
Aumento de los casos
Con frecuencia, el incumplimiento del abono de las pensiones a los hijos supone el embargo de los bienes en la vía de la jurisdicción civil.
En Valladolid, el impago de pensiones no comporta regularmente el ingreso en prisión, y son los juzgados de Instrucción y de Primera Instancia los que cuando se producen unos supuestos de estas características los que se inhiben en favor del nuevo Juzgado de Violencia Doméstica, lo que en la práctica está comportando una sobrecarga para este órgano jurisdiccional.
Fuentes de este juzgado indicaron que en Valladolid se registran una media de seis denuncias diarias por impagos de pensiones a la esposa e hijos (......)
La Audiencia de Valladolid considera que el impago de pensiones es violencia machista
03/10/2007.
En la ciudad, se denuncian seis casos diarios por incumplir este deber familiar que «vulnera el derecho de la mujer».
J. MORENO / El Norte de Castilla
La Audiencia Provincial de Valladolid acordó el pasado mes de junio, frente del criterio de la mayor parte de las audiencias de España, que el impago de pensiones en una pareja separada debe considerarse como un supuesto de violencia de género, por lo que atribuye la resolución de cuantos casos de conflictividad se generen al nuevo Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Valladolid.(.....)
El acuerdo adoptado en la reunión del 26 de junio por los magistrados de las dos secciones de lo Penal de la Audiencia vallisoletana supone que la resolución de las diferencias por la falta de pago de las pensiones de los hijos pasan de dejar de ser competencia de los jueces de Primera Instancia y Familia.
Según la Audiencia de Valladolid, que junto con la de Pontevedra es la única que se ha pronunciado en este supuesto:
1.- «la Ley Orgánica del Poder Judicial no exige que la mujer y los hijos hayan sufrido actos de violencia previa», por lo que debe ser el nuevo órgano judicial creado el encargado de dirimir estos litigios.
2.- «Tampoco exige que haya violencia psíquica o física previa. La dejación del cumplimiento de deberes familiares supone un acto de violencia machista, al vulnerar los derechos de la mujer y de los menores en el ámbito familiar», dice la resolución de unificación de doctrina de la Audiencia de Valladolid,.....
Aumento de los casos
Con frecuencia, el incumplimiento del abono de las pensiones a los hijos supone el embargo de los bienes en la vía de la jurisdicción civil.
En Valladolid, el impago de pensiones no comporta regularmente el ingreso en prisión, y son los juzgados de Instrucción y de Primera Instancia los que cuando se producen unos supuestos de estas características los que se inhiben en favor del nuevo Juzgado de Violencia Doméstica, lo que en la práctica está comportando una sobrecarga para este órgano jurisdiccional.
Fuentes de este juzgado indicaron que en Valladolid se registran una media de seis denuncias diarias por impagos de pensiones a la esposa e hijos (......)
miércoles, 3 de octubre de 2007
Premios del Observatorio de Violencia "Doméstica"
El presidente del Supremo felicita a la Federación de Mujeres Progresistas
“No siempre hemos contado con los mejores instrumentos”, lamenta Hernando
http://hispanidad.com/noticia.aspx?ID=19232
Este lunes, 1 de Octubre de 2007, se entregaban los IV Premios del Observatorio contra la Violencia doméstica y de género del CGPJ que dirige la feminista Montserrat Comas.
En el salón de actos del Consejo estaban presentes, además de Comas, el Fiscal General del Estado, Cándido Conde Pumpido y el presidente del Tribunal Supremo, Francisco Hernando que actuó de anfitrión como presidente también del CGPJ.
Durante su discurso, Hernando señaló que los jueces habían estado “en primera línea” de las patologías sociales y lamentó que “no siempre hemos contado con los mejores instrumentos”.
En su opinión, las asociaciones feministas son “ejemplares luchadoras contra la sinrazón” y por eso le da la enhorabuena a las asociaciones premiadas Clara Campoamor y Federación de Mujeres Progresistas.
“Estamos trabajando sin pausa en la erradicación de esa muestra de violencia”, concluyó Hernando.
Eso para que luego le censuren los ‘progres’.
Y atentos, porque una de las premiadas fue el looby de mujeres, ese lobby que consigue llevarse el 100% del presupuesto comunitario en materia de mujer. Lo que se dice tolerantes con el dinero público.
Por supuesto, todo estuvo regado de permanentes referencias a la “violencia machista” y la insistencia de Comas de que la “violencia de género” es “distinta” a otro tipo de violencia.
Es -según las feministas- la que se produce contra la mujer por el hecho de ser mujer.
El acto fue emotivo, marcado por el sentimiento.
Muchas de las premiadas lloraron en sus palabras. La que mejor verbo tenía: Blanca Castilla Ruiz, la presidenta de la asociación Clara Campoamor, una vasca que lleva picando piedra desde 1981.
“Tardamos 20 años en que se presentara la primera ley; fue en 2001, la perdimos, pero por lo menos se presentó”.
Castilla pidió que se aplique el 25.2 de la Constitución para que se cumplan íntegramente las penas.
“Las víctimas no quieren venganza; quieren justicia”.
Y más: “Loli (en referencia de una madre que perdió a su hija asesinada por su pareja) necesita saber cuándo va a salir el agresor de su hija, porque si no, no puede vivir”.
Por último, la presidenta de la Federación de Mujeres Progresistas, Yolanda Besteiro, señaló que “sólo cuando hayamos conseguido la igualdad de oportunidades habremos superado la lacra de la violencia de género”.
Así que como ven, para las feministas ambos fenómenos están vinculados.
¿Significa el macabro conteo que no estamos avanzando nada en igualdad de oportunidades?
Las feministas están locas. Se creen que no hay otro mundo que el femenino y tratan de imponerlo con todas las armas a su alcance. La llegada de una mujer a un puesto de responsabilidad genera toda una solidaridad femenina.
“Cuando una mujer llega, llegamos todas”, decía De la Vega.
Y no sólo eso, sino que confunden los graves problemas de convivencia en una sociedad compleja con la violencia contra la mujer “por el hecho de ser mujer”, una realidad inexistente.
La ideología se impone.
Llevan 21 años picando piedra y han ganado. Pero lo peor es que las altas instituciones del Estado se pongan al servicio de una ideología totalizante, totalitaria e irracional.
“No siempre hemos contado con los mejores instrumentos”, lamenta Hernando
http://hispanidad.com/noticia.aspx?ID=19232
Este lunes, 1 de Octubre de 2007, se entregaban los IV Premios del Observatorio contra la Violencia doméstica y de género del CGPJ que dirige la feminista Montserrat Comas.
En el salón de actos del Consejo estaban presentes, además de Comas, el Fiscal General del Estado, Cándido Conde Pumpido y el presidente del Tribunal Supremo, Francisco Hernando que actuó de anfitrión como presidente también del CGPJ.
Durante su discurso, Hernando señaló que los jueces habían estado “en primera línea” de las patologías sociales y lamentó que “no siempre hemos contado con los mejores instrumentos”.
En su opinión, las asociaciones feministas son “ejemplares luchadoras contra la sinrazón” y por eso le da la enhorabuena a las asociaciones premiadas Clara Campoamor y Federación de Mujeres Progresistas.
“Estamos trabajando sin pausa en la erradicación de esa muestra de violencia”, concluyó Hernando.
Eso para que luego le censuren los ‘progres’.
Y atentos, porque una de las premiadas fue el looby de mujeres, ese lobby que consigue llevarse el 100% del presupuesto comunitario en materia de mujer. Lo que se dice tolerantes con el dinero público.
Por supuesto, todo estuvo regado de permanentes referencias a la “violencia machista” y la insistencia de Comas de que la “violencia de género” es “distinta” a otro tipo de violencia.
Es -según las feministas- la que se produce contra la mujer por el hecho de ser mujer.
El acto fue emotivo, marcado por el sentimiento.
Muchas de las premiadas lloraron en sus palabras. La que mejor verbo tenía: Blanca Castilla Ruiz, la presidenta de la asociación Clara Campoamor, una vasca que lleva picando piedra desde 1981.
“Tardamos 20 años en que se presentara la primera ley; fue en 2001, la perdimos, pero por lo menos se presentó”.
Castilla pidió que se aplique el 25.2 de la Constitución para que se cumplan íntegramente las penas.
“Las víctimas no quieren venganza; quieren justicia”.
Y más: “Loli (en referencia de una madre que perdió a su hija asesinada por su pareja) necesita saber cuándo va a salir el agresor de su hija, porque si no, no puede vivir”.
Por último, la presidenta de la Federación de Mujeres Progresistas, Yolanda Besteiro, señaló que “sólo cuando hayamos conseguido la igualdad de oportunidades habremos superado la lacra de la violencia de género”.
Así que como ven, para las feministas ambos fenómenos están vinculados.
¿Significa el macabro conteo que no estamos avanzando nada en igualdad de oportunidades?
Las feministas están locas. Se creen que no hay otro mundo que el femenino y tratan de imponerlo con todas las armas a su alcance. La llegada de una mujer a un puesto de responsabilidad genera toda una solidaridad femenina.
“Cuando una mujer llega, llegamos todas”, decía De la Vega.
Y no sólo eso, sino que confunden los graves problemas de convivencia en una sociedad compleja con la violencia contra la mujer “por el hecho de ser mujer”, una realidad inexistente.
La ideología se impone.
Llevan 21 años picando piedra y han ganado. Pero lo peor es que las altas instituciones del Estado se pongan al servicio de una ideología totalizante, totalitaria e irracional.
Violencia Doméstica: ¿ Madres Asesinas ?
Madres asesinas
Diario de Cadiz / 23.09.2007
http://www.diariodecadiz.es/169176_ESN_HTML.htm
Mariló Montero
En general, me cuesta creer que lo sean, al menos alevosas.
No obstante, las estadísticas aseguran que un porcentaje muy elevado de los niños asesinados, lo son, en primer lugar, por sus progenitores; en segundo, por sus familiares cercanos; luego están los amigos y, por último, las desapariciones por secuestros de pederastas y otros maníacos.
¿Y por qué me planteo esta cuestión?
Pues porque nos han educado para verbalizar los interrogantes al objeto de hallar una respuesta que nos lleve, si es posible, a la solución.
Cada vez que nos informan de que una madre ha tirado a su bebé a la basura o que otra ha degollado a su hija de seis años y no nos dicen por qué lo han hecho siento un enorme desasosiego.
Aunque pasen días, de esas noticias se necesita conocer el final. Sin embargo, suelen quedarse en el primer impacto, en el titular sensacionalista y luego, donde uno puede encontrar la justificación que cerraría en redondo nuestra preocupación, que es en el por qué de las cosas, eso, al concluir el caso, no interesa.
Los medios alimentan el morbo natural –que no es otra cosa que la necesidad imperiosa de comprender lo que pasa–, pero no lo sacian, con lo que el morbo se convierte en detestable, ya que no se hace en beneficio del objetivo principal: comprender lo que pasa.
Lanzan el titular, exclamamos ¡qué barbaridad! y ahí quedó el problema, sin un por qué, sin una solución.
Necesitamos saber el contenido de la letra pequeña para ilustrar a la masa social, que no es otra cosa que la vecina de este tipo de personas, las cuales, es posible, no matarían en otras circunstancias.
Leo en un titular que una mujer de nacionalidad rumana ha tirado a su bebé recién nacido, vivo, al cubo de la basura.
Se me ocurren muchos por qué: era inmigrante y su situación económica estaba al límite…
Otro dato: ocultó su embarazo. Aquí hay cierta premeditación. Es decir, que tal vez llegaría a pensar que estaba sola y nadie la ayudaría. ¿Por qué? ¿Por la falta de solidaridad y el desinterés del vecindario justiciero que no se saluda ni dentro de un ascensor o cuando se cruza en la escalera?
Otro caso reciente es el de la madre en tratamiento psicológico que degolló a su hija y después intentó suicidarse.
Tampoco sabemos por qué. Quizá no estaba tan loca, puesto que, al parecer, sedó a su pequeña, tal vez para evitarle sufrimiento, lo cual denotaría cierto nivel de compasión por la niña.
O quizá, dado que su objetivo era suicidarse, no quiso que se quedara… ¿sola?
Una exclamación común ante este tipo de barbaridades difíciles de comprender es que cómo es posible que haya madres que maten a sus hijos en un país desarrollado como es España.
Quizá porque ellas no lo están. ¿Por qué?
Diario de Cadiz / 23.09.2007
http://www.diariodecadiz.es/169176_ESN_HTML.htm
Mariló Montero
En general, me cuesta creer que lo sean, al menos alevosas.
No obstante, las estadísticas aseguran que un porcentaje muy elevado de los niños asesinados, lo son, en primer lugar, por sus progenitores; en segundo, por sus familiares cercanos; luego están los amigos y, por último, las desapariciones por secuestros de pederastas y otros maníacos.
¿Y por qué me planteo esta cuestión?
Pues porque nos han educado para verbalizar los interrogantes al objeto de hallar una respuesta que nos lleve, si es posible, a la solución.
Cada vez que nos informan de que una madre ha tirado a su bebé a la basura o que otra ha degollado a su hija de seis años y no nos dicen por qué lo han hecho siento un enorme desasosiego.
Aunque pasen días, de esas noticias se necesita conocer el final. Sin embargo, suelen quedarse en el primer impacto, en el titular sensacionalista y luego, donde uno puede encontrar la justificación que cerraría en redondo nuestra preocupación, que es en el por qué de las cosas, eso, al concluir el caso, no interesa.
Los medios alimentan el morbo natural –que no es otra cosa que la necesidad imperiosa de comprender lo que pasa–, pero no lo sacian, con lo que el morbo se convierte en detestable, ya que no se hace en beneficio del objetivo principal: comprender lo que pasa.
Lanzan el titular, exclamamos ¡qué barbaridad! y ahí quedó el problema, sin un por qué, sin una solución.
Necesitamos saber el contenido de la letra pequeña para ilustrar a la masa social, que no es otra cosa que la vecina de este tipo de personas, las cuales, es posible, no matarían en otras circunstancias.
Leo en un titular que una mujer de nacionalidad rumana ha tirado a su bebé recién nacido, vivo, al cubo de la basura.
Se me ocurren muchos por qué: era inmigrante y su situación económica estaba al límite…
Otro dato: ocultó su embarazo. Aquí hay cierta premeditación. Es decir, que tal vez llegaría a pensar que estaba sola y nadie la ayudaría. ¿Por qué? ¿Por la falta de solidaridad y el desinterés del vecindario justiciero que no se saluda ni dentro de un ascensor o cuando se cruza en la escalera?
Otro caso reciente es el de la madre en tratamiento psicológico que degolló a su hija y después intentó suicidarse.
Tampoco sabemos por qué. Quizá no estaba tan loca, puesto que, al parecer, sedó a su pequeña, tal vez para evitarle sufrimiento, lo cual denotaría cierto nivel de compasión por la niña.
O quizá, dado que su objetivo era suicidarse, no quiso que se quedara… ¿sola?
Una exclamación común ante este tipo de barbaridades difíciles de comprender es que cómo es posible que haya madres que maten a sus hijos en un país desarrollado como es España.
Quizá porque ellas no lo están. ¿Por qué?
S.A.P.: Reconocido en los Juzgados de España, 2007
Los jueces constatan en sus sentencias decenas de casos de Alienación Parental.
Laverdad.es / 23.09.2007
http://www.laverdad.es/alicante/prensa/20070923/provincia_alicante/jueces-constatan-sentencias-decenas_20070923.html
Abogados y asociaciones afirman que los magistrados se muestran aún reacios a retirar las custodias.
Denuncian la escasez de recursos para atender los casos más severos: El síndrome puede dejar secuelas.
MANRIQUE C. SÁNCHEZ/ ALICANTE
Los jueces de Alicante han constatado en decenas de sentencias por separaciones y regímenes de visitas en los últimos años una realidad cada vez más presente en la sociedad actual: el síndrome de alienación parental (SAP).
No es más que el lavado de cerebro practicado por uno de los progenitores a su hijo para predisponerlo de forma enfermiza hacia el otro.
En la mayoría de los casos -aproximadamente uno de cada cinco separaciones conflictivas- los magistrados establecen la existencia de este trastorno infantil inducido, pero se muestran reacios a retirar la custodia del menor por parte del padre o la madre que lo ha causado, tal y como coinciden asociaciones de separados y abogados especializados en esta materia.
«Apenas hay una decena de sentencias en toda España en ese sentido porque los jueces no dan el paso», afirma Bruno Murillo, portavoz de la Plataforma por la Igualdad y la Custodia Compartida , coincidiendo así con el presidente de la Unión de Padres Separados, Ramón Pastor.
Un letrado confirma que muchas veces los juzgados reconocen la existencia de esa manipulación, pero suelen mantener la custodia y variar únicamente el régimen de visitas.
«Sí se han algunos casos de retirada de custodias por el SAP», le contradicen desde el Juzgado de Primera Instancia 8 de Alicante, especializado junto a su homólogo del 10 en Familia.
A la hora de adoptar este tipo de resoluciones, «es muy importante seguir el criterio de ver qué padre va a favorecer el acercamiento al otro progenitor, señala una psicóloga del Palacio de Justicia de Benalúa. Las medidas, no obstante, no deben necesariamente pasar por ese extremo.
Todo depende, apunta un secretario judicial, del grado del SAP, que puede ir de leve a severo. En esa última hipótesis, los Servicios Sociales pueden incluso asumir la tutela del menor e ingresarlo en una casa de acogida porque los problemas psicológicos podrían ser irreversibles.
El problema es que no existen centros ni recursos públicos adecuados para esta problemática.
Lo más común, no obstante, es ampliar el régimen de visitas al progenitor contra quien se está dirigiendo la instrumentalización del menor o dictaminar que esas visitas sean tuteladas.
«Hay que tener en cuenta que muchas veces el padre o madre que causa el SAP presenta un trastorno psiquiátrico o patológico como reacción emocional a una separación traumática. En ese caso se debe someter a un tratamiento», indica la psicóloga.
Fallos judiciales.
El pasado año, la sección cuarta de la Audiencia confirmó un fallo del Juzgado de Familia número 8 en el que se ordenaba «la supervisión y tratamiento médico y psicológico» de un menor para la «recuperación de su salud psicológica y el restablecimiento de los vínculos con el padre por observarse indicadores de la existencia de un síndrome de alienación parental severo».
Sin embargo, los magistrados suspendían el régimen de visitas del padre y mantenían la custodia para la madre porque dársela a él no era «una posibilidad realista» en ese momento.
En otro caso fallado en el 2003, el Juzgado de Primera Instancia 10 concedió la custodia de una niña a su padre, por entonces de 14 años, pese a que había indicios de «posible síndrome de alienación parental» y de que el entorno no favorecía su contacto con la madre.
Laverdad.es / 23.09.2007
http://www.laverdad.es/alicante/prensa/20070923/provincia_alicante/jueces-constatan-sentencias-decenas_20070923.html
Abogados y asociaciones afirman que los magistrados se muestran aún reacios a retirar las custodias.
Denuncian la escasez de recursos para atender los casos más severos: El síndrome puede dejar secuelas.
MANRIQUE C. SÁNCHEZ/ ALICANTE
Los jueces de Alicante han constatado en decenas de sentencias por separaciones y regímenes de visitas en los últimos años una realidad cada vez más presente en la sociedad actual: el síndrome de alienación parental (SAP).
No es más que el lavado de cerebro practicado por uno de los progenitores a su hijo para predisponerlo de forma enfermiza hacia el otro.
En la mayoría de los casos -aproximadamente uno de cada cinco separaciones conflictivas- los magistrados establecen la existencia de este trastorno infantil inducido, pero se muestran reacios a retirar la custodia del menor por parte del padre o la madre que lo ha causado, tal y como coinciden asociaciones de separados y abogados especializados en esta materia.
«Apenas hay una decena de sentencias en toda España en ese sentido porque los jueces no dan el paso», afirma Bruno Murillo, portavoz de la Plataforma por la Igualdad y la Custodia Compartida , coincidiendo así con el presidente de la Unión de Padres Separados, Ramón Pastor.
Un letrado confirma que muchas veces los juzgados reconocen la existencia de esa manipulación, pero suelen mantener la custodia y variar únicamente el régimen de visitas.
«Sí se han algunos casos de retirada de custodias por el SAP», le contradicen desde el Juzgado de Primera Instancia 8 de Alicante, especializado junto a su homólogo del 10 en Familia.
A la hora de adoptar este tipo de resoluciones, «es muy importante seguir el criterio de ver qué padre va a favorecer el acercamiento al otro progenitor, señala una psicóloga del Palacio de Justicia de Benalúa. Las medidas, no obstante, no deben necesariamente pasar por ese extremo.
Todo depende, apunta un secretario judicial, del grado del SAP, que puede ir de leve a severo. En esa última hipótesis, los Servicios Sociales pueden incluso asumir la tutela del menor e ingresarlo en una casa de acogida porque los problemas psicológicos podrían ser irreversibles.
El problema es que no existen centros ni recursos públicos adecuados para esta problemática.
Lo más común, no obstante, es ampliar el régimen de visitas al progenitor contra quien se está dirigiendo la instrumentalización del menor o dictaminar que esas visitas sean tuteladas.
«Hay que tener en cuenta que muchas veces el padre o madre que causa el SAP presenta un trastorno psiquiátrico o patológico como reacción emocional a una separación traumática. En ese caso se debe someter a un tratamiento», indica la psicóloga.
Fallos judiciales.
El pasado año, la sección cuarta de la Audiencia confirmó un fallo del Juzgado de Familia número 8 en el que se ordenaba «la supervisión y tratamiento médico y psicológico» de un menor para la «recuperación de su salud psicológica y el restablecimiento de los vínculos con el padre por observarse indicadores de la existencia de un síndrome de alienación parental severo».
Sin embargo, los magistrados suspendían el régimen de visitas del padre y mantenían la custodia para la madre porque dársela a él no era «una posibilidad realista» en ese momento.
En otro caso fallado en el 2003, el Juzgado de Primera Instancia 10 concedió la custodia de una niña a su padre, por entonces de 14 años, pese a que había indicios de «posible síndrome de alienación parental» y de que el entorno no favorecía su contacto con la madre.
Protocolo sobre Detenciones: ¿ Malos Tratos ?
2.- Interior reforma el protocolo de detenciones para evitar malos tratos
La nueva norma obliga a informar a los arrestados de su derecho a solicitar el 'habeas corpus' y restringe los cacheos e identificaciones
Larioja.com / 28.09.2007
http://www.larioja.com/20070928/espana/interior-reforma-protocolo-detenciones-20070928.html
MELCHOR SÁIZ-PARDO
El Ministerio del Interior ha reformado el protocolo que regula la detención y custodia de sospechosos de actuaciones delictivas con el fin de evitar casos de malos tratos y abusos durante los arrestos y en dependencias policiales.
La directiva cubre algunos vacíos legales existentes e introduce varias novedades, como restringir los cacheos e identificaciones callejeras y obligar a todos los agentes a que informen a los arrestados de su derecho a solicitar un 'habeas corpus', el control judicial de la detención.
Entre otros extremos, la norma regula el uso de bridas de plástico y desoye la recomendación de la ONU de grabar los interrogatorios.
La instrucción 12/2007, de 27 páginas, recibió el visto bueno del secretario de Estado para la Seguridad , Antonio Camacho, el pasado 14 de septiembre y comenzará a aplicarse en los próximos días.
Como primera innovación, establece de forma taxativa que el plazo de 72 horas de arresto se contará desde el momento de la captura del sospechoso, y no desde su traslado a la sede policial. La norma termina así con la arbitrariedad de los agentes a la hora de determinar en qué momento comenzaba el cómputo del plazo legal.
Derechos.
Los guardias civiles y policías tendrán que leer los derechos a los detenidos en una lengua que el arrestado entienda.
En las comisarías y cuarteles estarán disponibles «impresos de información de derechos en las lenguas más comunes». Hasta ahora, se consideraba suficiente la lectura de derechos en un idioma oficial español.
El capítulo de los derechos que deben conocer los detenidos se amplía con el del 'habeas corpus', de cuya existencia deben ser informados de manera expresa.
Las dependencias policiales deberán tener impresos de solicitud a disposición de cualquier arrestado que «considere que su detención no está justificada legalmente o que transcurre en condiciones ilegales».
La directiva incluye también reglas estrictas sobre la asistencia letrada: la solicitud de un abogado será «inmediata» y si, pasadas tres horas, el letrado no hubiera aparecido se le volverá a llamar.
De todas estas operaciones quedará constancia en un registro que hasta ahora no se usaba.
Todo el procedimiento quedaba al criterio de los agentes responsables del arresto.
Los funcionarios estarán obligados a trasladar «de forma inmediata» a un centro hospitalario a cualquier detenido que asegure sufrir una lesión, aunque no sea visible.
Si el arrestado estuviera bajo los efectos de estupefacientes o sufriera un trastorno mental también deberá ser llevado ante un médico antes de ir al calabozo.
La directiva acaba con la discrecionalidad de los funcionarios a la hora de valorar los daños del arrestado, visibles o no visibles.
El arresto de menores merece un apartado especial.
Los funcionarios deberán leer sus derechos a estos detenidos en «un lenguaje compresible y adecuado a su edad».
Será obligatorio que sean «agentes especializados» los que interroguen al adolescente.
Además, «la actuación policial evitará la estigmatización» del menor y con este fin los agentes no vestirán uniforme ni lucirán distintivos.
El traslado y la reclusión de los menores siempre se hará por separado de los adultos.
Interior también quiere restringir al máximo los abusos durante las identificaciones callejeras. La norma fija que cualquier «documento oficial» será válido para certificar la filiación, no sólo el DNI, como ocurre en la actualidad.
Sólo podrán ser conducidas a dependencias policiales para su identificación las personas que estén involucradas en delitos o que deban ser sancionadas, y siempre serán trasladadas al centro más cercano.
Los ciudadanos tendrán «derecho a no informar de otros datos distintos a los necesarios para su identificación».
Uso de la fuerza
El «empleo de la fuerza» durante las detenciones es otro de los temas de preocupación.
La directiva regula el uso de métodos coercitivos cuando exista un «grave riesgo para seguridad ciudadana, la vida del agente o la integridad física de terceras personas».
Sólo se blandirán las armas «cuando exista un riesgo racionalmente grave» y, en ningún caso, se podrán usar armas no autorizadas.
El cacheo se acota en exclusiva a los casos de detenciones y ante «sospechosos potencialmente peligrosos» y se termina con la discrecionalidad de los funcionarios a la hora de decidir a quién inspeccionar en profundidad.
Los agentes siempre «protegerán la dignidad del detenido» y harán el registro de la manera más «discreta posible».
«Salvo urgencia», siempre serán funcionarios del mismo sexo los que cacheen, también en el caso de personas transexuales, recoge la directiva.
La nueva norma obliga a informar a los arrestados de su derecho a solicitar el 'habeas corpus' y restringe los cacheos e identificaciones
Larioja.com / 28.09.2007
http://www.larioja.com/20070928/espana/interior-reforma-protocolo-detenciones-20070928.html
MELCHOR SÁIZ-PARDO
El Ministerio del Interior ha reformado el protocolo que regula la detención y custodia de sospechosos de actuaciones delictivas con el fin de evitar casos de malos tratos y abusos durante los arrestos y en dependencias policiales.
La directiva cubre algunos vacíos legales existentes e introduce varias novedades, como restringir los cacheos e identificaciones callejeras y obligar a todos los agentes a que informen a los arrestados de su derecho a solicitar un 'habeas corpus', el control judicial de la detención.
Entre otros extremos, la norma regula el uso de bridas de plástico y desoye la recomendación de la ONU de grabar los interrogatorios.
La instrucción 12/2007, de 27 páginas, recibió el visto bueno del secretario de Estado para la Seguridad , Antonio Camacho, el pasado 14 de septiembre y comenzará a aplicarse en los próximos días.
Como primera innovación, establece de forma taxativa que el plazo de 72 horas de arresto se contará desde el momento de la captura del sospechoso, y no desde su traslado a la sede policial. La norma termina así con la arbitrariedad de los agentes a la hora de determinar en qué momento comenzaba el cómputo del plazo legal.
Derechos.
Los guardias civiles y policías tendrán que leer los derechos a los detenidos en una lengua que el arrestado entienda.
En las comisarías y cuarteles estarán disponibles «impresos de información de derechos en las lenguas más comunes». Hasta ahora, se consideraba suficiente la lectura de derechos en un idioma oficial español.
El capítulo de los derechos que deben conocer los detenidos se amplía con el del 'habeas corpus', de cuya existencia deben ser informados de manera expresa.
Las dependencias policiales deberán tener impresos de solicitud a disposición de cualquier arrestado que «considere que su detención no está justificada legalmente o que transcurre en condiciones ilegales».
La directiva incluye también reglas estrictas sobre la asistencia letrada: la solicitud de un abogado será «inmediata» y si, pasadas tres horas, el letrado no hubiera aparecido se le volverá a llamar.
De todas estas operaciones quedará constancia en un registro que hasta ahora no se usaba.
Todo el procedimiento quedaba al criterio de los agentes responsables del arresto.
Los funcionarios estarán obligados a trasladar «de forma inmediata» a un centro hospitalario a cualquier detenido que asegure sufrir una lesión, aunque no sea visible.
Si el arrestado estuviera bajo los efectos de estupefacientes o sufriera un trastorno mental también deberá ser llevado ante un médico antes de ir al calabozo.
La directiva acaba con la discrecionalidad de los funcionarios a la hora de valorar los daños del arrestado, visibles o no visibles.
El arresto de menores merece un apartado especial.
Los funcionarios deberán leer sus derechos a estos detenidos en «un lenguaje compresible y adecuado a su edad».
Será obligatorio que sean «agentes especializados» los que interroguen al adolescente.
Además, «la actuación policial evitará la estigmatización» del menor y con este fin los agentes no vestirán uniforme ni lucirán distintivos.
El traslado y la reclusión de los menores siempre se hará por separado de los adultos.
Interior también quiere restringir al máximo los abusos durante las identificaciones callejeras. La norma fija que cualquier «documento oficial» será válido para certificar la filiación, no sólo el DNI, como ocurre en la actualidad.
Sólo podrán ser conducidas a dependencias policiales para su identificación las personas que estén involucradas en delitos o que deban ser sancionadas, y siempre serán trasladadas al centro más cercano.
Los ciudadanos tendrán «derecho a no informar de otros datos distintos a los necesarios para su identificación».
Uso de la fuerza
El «empleo de la fuerza» durante las detenciones es otro de los temas de preocupación.
La directiva regula el uso de métodos coercitivos cuando exista un «grave riesgo para seguridad ciudadana, la vida del agente o la integridad física de terceras personas».
Sólo se blandirán las armas «cuando exista un riesgo racionalmente grave» y, en ningún caso, se podrán usar armas no autorizadas.
El cacheo se acota en exclusiva a los casos de detenciones y ante «sospechosos potencialmente peligrosos» y se termina con la discrecionalidad de los funcionarios a la hora de decidir a quién inspeccionar en profundidad.
Los agentes siempre «protegerán la dignidad del detenido» y harán el registro de la manera más «discreta posible».
«Salvo urgencia», siempre serán funcionarios del mismo sexo los que cacheen, también en el caso de personas transexuales, recoge la directiva.
Memoria de la Fiscalia General del Estado 2006
1.- Reformas del Código Penal propuestas por la Fiscalía General del Estado.
http://bitacoras.juridicas.com/blog/amparo-legal/2007/09/reformas-del-c-digo-penal-propuestas-por-la-fiscal-a-general-del-estado
El pasado 17 de Septiembre se celebró el acto de apertura del año judicial, en el cual se presentó la Memoria de la Fiscalía General del Estado del año 2006.
Este documento resume la actividad desarrollada por el Ministerio Fiscal en todo el territorio español durante el año 2006, así como la valoración de los Fiscales acerca de la evolución de la criminalidad y la prevención del delito.
El artículo 9 del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal dispone que en la Memoria anual de la Fiscalía General del Estado se incluyan las propuestas de aquellas reformas convenientes para una mayor eficacia de la Justicia.
Se trata de recopilar las sugerencias que los diferentes Fiscales Jefes incorporan en sus respectivos resúmenes anuales.
En esta edición de la Memoria destacamos las siguientes propuestas en cuanto a modificaciones de derecho sustantivo.
Impago de pensiones. Habida cuenta de su configuración como delito semi-privado (exige denuncia del ofendido, que en cierta manera deja en manos de éste no sólo la iniciación del proceso sino su viabilidad al convertirse en parte esencial de la prueba con su declaración testifical) este delito corre el peligro de convertirse en una nueva versión de la “prisión por deudas”.
Se sugiere restringir la sanción penal a los incumplimientos de pensiones alimenticias para el cónyuge y los hijos, excluyendo el impago de la pensión compensatoria, susceptible de ser reclamada en vía civil, y cuya persecución penal podría contradecir el principio de “mínima intervención”.
http://bitacoras.juridicas.com/blog/amparo-legal/2007/09/reformas-del-c-digo-penal-propuestas-por-la-fiscal-a-general-del-estado
El pasado 17 de Septiembre se celebró el acto de apertura del año judicial, en el cual se presentó la Memoria de la Fiscalía General del Estado del año 2006.
Este documento resume la actividad desarrollada por el Ministerio Fiscal en todo el territorio español durante el año 2006, así como la valoración de los Fiscales acerca de la evolución de la criminalidad y la prevención del delito.
El artículo 9 del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal dispone que en la Memoria anual de la Fiscalía General del Estado se incluyan las propuestas de aquellas reformas convenientes para una mayor eficacia de la Justicia.
Se trata de recopilar las sugerencias que los diferentes Fiscales Jefes incorporan en sus respectivos resúmenes anuales.
En esta edición de la Memoria destacamos las siguientes propuestas en cuanto a modificaciones de derecho sustantivo.
Impago de pensiones. Habida cuenta de su configuración como delito semi-privado (exige denuncia del ofendido, que en cierta manera deja en manos de éste no sólo la iniciación del proceso sino su viabilidad al convertirse en parte esencial de la prueba con su declaración testifical) este delito corre el peligro de convertirse en una nueva versión de la “prisión por deudas”.
Se sugiere restringir la sanción penal a los incumplimientos de pensiones alimenticias para el cónyuge y los hijos, excluyendo el impago de la pensión compensatoria, susceptible de ser reclamada en vía civil, y cuya persecución penal podría contradecir el principio de “mínima intervención”.
Presidencia de Gobierno y las Falsas Denuncias sobre Maltrato
De: gabinete@presidencia.gob.es
martes, 02 de octubre de 2007
Para:
ANTONIO FERNANDEZ CASTILLO (antoniopegaso@hotmail.com)
Me pongo en contacto con usted para responder al escrito que ha enviado a la Presidencia del Gobierno, en el que remiten otro de la Federación de madres y padres separados de Euskadi, en el que se pone de manifiesto la preocupación por la actuación de determinadas mujeres,capaces de acusar a sus parejas de malos tratos sin que éstos se hayan cometido, y las consecuencias que este tipo de actuaciones tienen en los hijos.
Respecto a lo que nos expone en su escrito, quiero indicarle que la normativa que ha impulsado el Gobierno en materia de violencia de género,cuya finalidad es hacer frente a una trágica e innegable realidad, a través de un enfoque multidisciplinar, puede ser, en algunos casos, objeto de una utilización fraudulenta.
Sin embargo, el ordenamiento penal y procesal cuenta con los adecuados sistemas de respuesta para estas disfunciones que, sin duda alguna, serán utilizados por la Administración de Justicia; por todo lo cual, creemos necesario, si nos lo permite, recomendar a todas aquellas personas que se encuentren en el supuesto que usted denuncia en su escrito,que sigan las indicaciones del abogado que ejerza su defensa, dado que, en el ejercicio de su profesión, será quien mejor podrá aconsejarle sobre las acciones e instrumentos procesales disponibles que, en cada momento, sea conveniente ejercitar para la protección de los derechos que considere lesionados, además de la idoneidad para encauzar el asunto en defensa de sus intereses.
Reciba un cordial saludo.
José Enrique Serrano Martínez.
Director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno.
martes, 02 de octubre de 2007
Para:
ANTONIO FERNANDEZ CASTILLO (antoniopegaso@hotmail.com)
Me pongo en contacto con usted para responder al escrito que ha enviado a la Presidencia del Gobierno, en el que remiten otro de la Federación de madres y padres separados de Euskadi, en el que se pone de manifiesto la preocupación por la actuación de determinadas mujeres,capaces de acusar a sus parejas de malos tratos sin que éstos se hayan cometido, y las consecuencias que este tipo de actuaciones tienen en los hijos.
Respecto a lo que nos expone en su escrito, quiero indicarle que la normativa que ha impulsado el Gobierno en materia de violencia de género,cuya finalidad es hacer frente a una trágica e innegable realidad, a través de un enfoque multidisciplinar, puede ser, en algunos casos, objeto de una utilización fraudulenta.
Sin embargo, el ordenamiento penal y procesal cuenta con los adecuados sistemas de respuesta para estas disfunciones que, sin duda alguna, serán utilizados por la Administración de Justicia; por todo lo cual, creemos necesario, si nos lo permite, recomendar a todas aquellas personas que se encuentren en el supuesto que usted denuncia en su escrito,que sigan las indicaciones del abogado que ejerza su defensa, dado que, en el ejercicio de su profesión, será quien mejor podrá aconsejarle sobre las acciones e instrumentos procesales disponibles que, en cada momento, sea conveniente ejercitar para la protección de los derechos que considere lesionados, además de la idoneidad para encauzar el asunto en defensa de sus intereses.
Reciba un cordial saludo.
José Enrique Serrano Martínez.
Director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)