madridpress.com/Viernes, 10 de febrero de 2017
Cada vez son más las personas casadas que deciden poner fin a su relación en busca de empezar una nueva vida que les devuelva la chispa del amor o por lo menos así suele suceder por una de las partes y cuando llega la hora de la separación, no siempre se llega a un acuerdo, de ahí que existan diferentes tipos de divorcios.
Según los diferentes abogados (...) que hemos consultado por cercanía, la principal diferencia entre ambos es que uno se produce de mutuo acuerdo y en el otro se toma mediante una decisión unipersonal de una de las partes.
Vamos a desgranar cada tipo de divorcio para conocer cada uno de ellos un poco más a fondo.
Tipos de divorcios:
Divorcio de mutuo acuerdo. Este tipo de divorcio también es el conocido como “divorcio express” ya que es más rápido que acudir al contencioso, del que te hablaremos a continuación, aunque igualmente pasa por vía judicial.
La demanda de divorcio ha de presentarse con el consentimiento de ambas partes aunque pudiera estar presente solo una de ellas, siempre acompañado de una autorización de la otra persona.
En la documentación aportada se deberá dejar constancia del acuerdo en diferentes ámbitos tales como los pactos a llevar a cabo para la guardia y custodia de los hijos.
De todos modos, será el juez en último caso quién dictaminará que se puedan cumplir las condiciones y que las mismas no sean abusivas. Es decir, que por mucho que una parte acepte rebajarse a la otra, puede no ser aceptado por el juez destinado a resolver el divorcio.
Divorcio contencioso: Aunque igualmente se trata de un proceso judicial, en este caso no tiene que venir motivado y puede llevarse a cabo solo por una de las partes sin la necesidad del consentimiento de la otra.
Eso sí, por lo menos se han de llevar tres meses casados para iniciar el proceso a no ser que alguna de las partes se vea amenazada, denigrada.
El caso es que debido a la cantidad de divorcios que existen en tramitación en la actualidad y la falta de recursos judiciales, se trata de un proceso que puede costarnos caro no solo psicológicamente, sino que también emocionalmente, ante las ganas que podamos tener de terminar con la relación y empezar de cero cuanto antes.
Después de leer la información tanto del divorcio amistoso como contencioso, claro está que la vía más rápida y económica es la 1ª, pero para ello, no solo debe de existir voluntad por ambas partes, sino que también han de estar de acuerdo en diferentes puntos como el importe de la pensión, las visitas, custodia, gastos extras, etc.
Algo que por desgracia, no sucede demasiadas veces en nuestro país.
Cada vez son más las personas casadas que deciden poner fin a su relación en busca de empezar una nueva vida que les devuelva la chispa del amor o por lo menos así suele suceder por una de las partes y cuando llega la hora de la separación, no siempre se llega a un acuerdo, de ahí que existan diferentes tipos de divorcios.
Según los diferentes abogados (...) que hemos consultado por cercanía, la principal diferencia entre ambos es que uno se produce de mutuo acuerdo y en el otro se toma mediante una decisión unipersonal de una de las partes.
Vamos a desgranar cada tipo de divorcio para conocer cada uno de ellos un poco más a fondo.
Tipos de divorcios:
Divorcio de mutuo acuerdo. Este tipo de divorcio también es el conocido como “divorcio express” ya que es más rápido que acudir al contencioso, del que te hablaremos a continuación, aunque igualmente pasa por vía judicial.
La demanda de divorcio ha de presentarse con el consentimiento de ambas partes aunque pudiera estar presente solo una de ellas, siempre acompañado de una autorización de la otra persona.
En la documentación aportada se deberá dejar constancia del acuerdo en diferentes ámbitos tales como los pactos a llevar a cabo para la guardia y custodia de los hijos.
De todos modos, será el juez en último caso quién dictaminará que se puedan cumplir las condiciones y que las mismas no sean abusivas. Es decir, que por mucho que una parte acepte rebajarse a la otra, puede no ser aceptado por el juez destinado a resolver el divorcio.
Divorcio contencioso: Aunque igualmente se trata de un proceso judicial, en este caso no tiene que venir motivado y puede llevarse a cabo solo por una de las partes sin la necesidad del consentimiento de la otra.
Eso sí, por lo menos se han de llevar tres meses casados para iniciar el proceso a no ser que alguna de las partes se vea amenazada, denigrada.
El caso es que debido a la cantidad de divorcios que existen en tramitación en la actualidad y la falta de recursos judiciales, se trata de un proceso que puede costarnos caro no solo psicológicamente, sino que también emocionalmente, ante las ganas que podamos tener de terminar con la relación y empezar de cero cuanto antes.
Después de leer la información tanto del divorcio amistoso como contencioso, claro está que la vía más rápida y económica es la 1ª, pero para ello, no solo debe de existir voluntad por ambas partes, sino que también han de estar de acuerdo en diferentes puntos como el importe de la pensión, las visitas, custodia, gastos extras, etc.
Algo que por desgracia, no sucede demasiadas veces en nuestro país.