El desajuste del reloj interno de las personas hace que la sensación de cansancio y estrés les invada.
Hace apenas unos días todos los relojes de España se retrasaban 1 hora. Este hecho genera debate todos los años entre la sociedad pues, hay quienes se alegran de disponer de 1 hora más para poder dormir y, quienes no están a favor de que anochezca antes ya que supone hacer mayor uso del alumbrado eléctrico en los hogares, justamente en un momento en el que el precio de la luz es muy elevado.
Dejando de lado el debate a favor y en contra del cambio de hora, lo que sí está demostrado es que provoca en las personas sensación de cansancio y estrés hasta que el cuerpo consigue adaptarse al nuevo horario de invierno. Pero ¿Por qué te invade el cansancio? Al anochecer más temprano el cuerpo segrega melatonina antes -la hormona que facilita el sueño– haciendo que sientas cansancio cuando aún estás activo.
Este desajuste interno en el funcionamiento de nuestro cuerpo también afecta a otras áreas de la salud, como alteración del ritmo biológico, problemas estomacales, el envejecimiento de la piel y al estado de ánimo.
Cabe añadir que, con la caída de la luz solar 1 hora antes, los días parecen ser más cortos y a la hora de dar cobertura a todas las tareas diarias, ya sean laborales o domésticas, también provoca la sensación de falta tiempo para hacer todas las actividades. Pero no te preocupes porque existen consejos para que te adaptes mejor cambio horario.
Evita un cambio brusco
A partir de ahora y en los siguientes meses cuando te despiertes ya habrá salido el sol, levantarás la persiana y la luz te impactará. Puede resultar molesto para los ojos y para el estado de ánimo al no estar acostumbrado, pero piensa en positivo, has ganado 1 hora más a la mañana.
Es lógico que te despiertes antes de la hora y estes cansado antes por la tarde, pero lleva un ritmo de vida normal e intenta retrasar 15 minutos la hora de irte a dormir y levantarte un poco más tarde. En un par de semanas lograr estar sincronizado con este nuevo horario.
La luz solar es tu aliado
La luz solar cuando impacta en la piel hace que el organismo produzca vitamina D, la cual juega un papel importante en el sistema nervioso, muscular e inmunitario. En el caso de la iluminación, con este cambio horario hay menos horas de sol en el día por lo que aprovecha todo lo posible los rayos del sol en tu beneficio para mantenerte activo.
Haz ejercicio físico
La sensación de cansancio trae consigo la necesidad o, al menos, el deseo de querer dormir un rato después de comer. Ese descanso conocido como “la siesta” puede parecer un aliado para combatir el sueño, pero no lo es, sólo conseguirás alterar aún más tu reloj interno. En su sustitución es mejor optar por practicar ejercicio físico para activar el cuerpo. El movimiento te dará energía.
A partir de ahora y en los siguientes meses cuando te despiertes ya habrá salido el sol, levantarás la persiana y la luz te impactará. Puede resultar molesto para los ojos y para el estado de ánimo al no estar acostumbrado, pero piensa en positivo, has ganado 1 hora más a la mañana.
Es lógico que te despiertes antes de la hora y estes cansado antes por la tarde, pero lleva un ritmo de vida normal e intenta retrasar 15 minutos la hora de irte a dormir y levantarte un poco más tarde. En un par de semanas lograr estar sincronizado con este nuevo horario.
La luz solar es tu aliado
La luz solar cuando impacta en la piel hace que el organismo produzca vitamina D, la cual juega un papel importante en el sistema nervioso, muscular e inmunitario. En el caso de la iluminación, con este cambio horario hay menos horas de sol en el día por lo que aprovecha todo lo posible los rayos del sol en tu beneficio para mantenerte activo.
Haz ejercicio físico
La sensación de cansancio trae consigo la necesidad o, al menos, el deseo de querer dormir un rato después de comer. Ese descanso conocido como “la siesta” puede parecer un aliado para combatir el sueño, pero no lo es, sólo conseguirás alterar aún más tu reloj interno. En su sustitución es mejor optar por practicar ejercicio físico para activar el cuerpo. El movimiento te dará energía.
Cuida las comidas
Los alimentos que ingerimos condicionan la salud. Hacer una dieta equilibrada aporta a nuestro organismo los nutrientes necesarios para un correcto funcionamiento por lo que, aunque haya cambiado la hora y con ella nuestro ritmo diario, se deben mantener los mismos horarios de comidas. En este caso, presta especial atención a la cena, procurando consumir alimentos ligeros que no afecten de más al estómago y al menos, 2 horas antes de irte a la cama.
Estimula tu melatonina
Como ya se ha dicho anteriormente en este artículo, la melatonina es la hormona encargada de facilitar el sueño por eso si incluyes en tu dieta alimentos ricos en triptófano, un aminoácido esencial para la segregación de dicha hormona, favoreces el sueño reparador.