Primera hipoteca con el inmueble como única garantía

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Bankinter lanza una hipoteca con el inmueble como única garantía.
Financia hasta el 80% del coste de la vivienda habitual a 40 años.


J. Portillo - Madrid - 13/07/2011
Bankinter ha decidido romper con los usos de la banca española para comenzar a comercializar hoy una hipoteca en la que la vivienda es la única garantía en caso de impago.
La cláusula de la dación en pago puede pactarse en España con la entidad que concede el crédito, pero se trata de una práctica completamente marginal.
Mientras crece la presión social para que esta fórmula se imponga como única, y el sector financiero pugna porque no sea así, Bankinter lanza un nuevo producto que parte de esta premisa como principal atractivo.


La "Hipoteca sin más" está dirigida a la adquisición de la vivienda habitual, y financiará hasta el 80% del valor del inmueble (sobre un máximo de 600.000 euros) a un plazo máximo de 40 años.
El tipo de interés es fijo durante el 1º año, del 4% TAE, y variable a partir del 2º.
Entonces el interés, aunque estará ligado al euríbor, "dependerá de cada cliente", exponen desde la entidad.
En las hipotecas tradicionales que ofrece la entidad, el tipo de interés suele ser de euríbor más 1,80%, si se domicilia la nómina y se contratan ciertos seguros.


Desde Bankinter aseguran que la nueva línea hipotecaria que abren no supondrá un sobrecoste para el cliente, y que las exigencias que se le reclamarán son las mismas que se solicitan al resto.
"Podemos hacerlo porque tenemos una escuela de riesgos muy estricta, que nos convence de que nuestros clientes van a ser capaces de devolvernos los préstamos", expone María Paramés, directora de Comunicación Corporativa del banco.

Un informe de la consultora Oliver Wyman, que maneja la patronal bancaria (AEB), estima, sin embargo, que la introducción de la dación en pago encarece la hipoteca entre 60 y 150 euros al mes.
Una variación que se deriva del coste extra (entre 1.000 y 4.000 millones) que supondría para las entidades asumir la dación en pago.


Bankinter continuará comercializando las hipotecas tradicionales junto a la nueva.
A falta de comparar el coste que supone cada una para el cliente, la seguridad de que en caso de impago no habrá que "responder con todos los bienes presentes o futuros", sino solo entregando las llaves, puede ser un buen reclamo comercial en un país que ha vivido 293.000 embargos desde que comenzó la crisis.