viernes, 18 de octubre de 2024

EE.UU.: ¿Qué ha causado la reducción en los divorcios?

Si bien menos personas se casan, también menos personas se divorcian.
Naveed Saleh M.D., M.S,16 de octubre de 2024
Las tasas de divorcio han ido disminuyendo en las últimas décadas, después de aumentar en los años 70 y 80.
La caída de las tasas de divorcio puede deberse específicamente a que menos mujeres jóvenes se divorcian.
Somos más permisivos con la cohabitación, lo que podría explicar por qué las tasas de divorcio disminuyen.
La terapia de pareja ha desempeñado un papel en la disminución de las tasas de divorcio.

Una de las realidades más tristes de la vida es que la mayoría de los matrimonios no duran toda la vida. Sin embargo, eso no quiere decir que incluso los matrimonios que finalmente fracasan no hayan sido hermosos y productivos en su momento.

Las tasas de divorcio aumentaron de 3.5 por 1000 personas en 1970 a 5.1 por 1000 en 1980. En ese momento, los estudiosos de la familia estaban preocupados por la pérdida de importancia del matrimonio, a pesar de las altas tasas de nuevos matrimonios. También les preocupaba el empeoramiento de los resultados de los hijos como consecuencia del divorcio y los vínculos con la reconciliación y la creación de familias reconstituidas. Además, el divorcio puede perpetuar las desigualdades socioeconómicas y de género. En otras palabras, el divorcio puede obligar a las mujeres a volver a casarse por razones económicas.


Entre 2000 y 2022, la tasa de divorcios cayó de 4.0 por 1000 a 2.4 por 1000. 
¿Qué sucedió?
Según un estudio publicado en Socius, es posible que el matrimonio represente hoy en día un estatus más raro y elitista. En 1980, había 10.6 matrimonios por cada 1000 personas, en comparación con 6.2 por cada mil en 2022.

La reciente disminución del divorcio, y la próxima disminución adicional, presenta un marcado contraste con la tendencia hacia una mayor cohabitación y una menor estabilidad dentro de las parejas que cohabitan, lo que implica una menor estabilidad entre las parejas estadounidenses fuera del matrimonio. Además, como se señaló anteriormente, las actitudes hacia el divorcio siguen volviéndose más permisivas”, escribió el Dr. Philip N. Cohen, profesor de la Universidad de Maryland.

Por otro lado, las tasas de matrimonio se mantienen en mínimos históricos y el matrimonio se está volviendo cada vez más selectivo, mientras que la seguridad económica predice cada vez más la estabilidad marital. En ese contexto, las tendencias presentadas aquí describen el progreso hacia un sistema en el que el matrimonio estadounidense es más raro y más estable (un estatus más elitista) que en el pasado”, agregó. 
En el estudio, Cohen descubrió que las tasas de divorcio han disminuido entre las mujeres más jóvenes, lo que explica la disminución. Aunque las mujeres mayores tienen más probabilidades de divorciarse, las tasas entre las mujeres mayores de 45 años dejaron de aumentar en la última década. Además, las parejas recién casadas pueden ser más protectoras de sus matrimonios.

Otra razón para la caída de las tasas de divorcio puede deberse al aumento de la terapia de pareja. Varios ensayos clínicos respaldan que la terapia de pareja reduce las dificultades generales o específicas, además de abordar problemas emocionales, conductuales y físicos.
Los componentes típicos de las intervenciones basadas en la pareja para problemas de salud mental y física individuales enfatizan el apoyo de la pareja, la mejora de la comunicación y una mayor atención al impacto adverso del trastorno en la relación de pareja”, escriben los autores en Family Process.

Las tasas de divorcio también podrían estar disminuyendo porque, a medida que las personas esperan más tiempo para casarse, la cohabitación está en aumento. Entre 2002 y 2013-17, el número de estadounidenses de entre 18 y 44 años que alguna vez cohabitaron aumentó del 52% al 59%. 
Además, el 69% de los estadounidenses están de acuerdo con la cohabitación, incluso en ausencia de matrimonio. 
En 2019, el 7% de las parejas cohabitaban frente al 3% en 1995, mientras que el 58% de las parejas estaban casadas en 1995 frente al 53% actual.

Cabe señalar que las opiniones sobre el matrimonio y la cohabitación difieren entre las afiliaciones religiosas. 
Por ejemplo, el 74% de los católicos aceptan la cohabitación, mientras que solo el 35% de los protestantes evangélicos blancos lo hacen.

En una nota positiva, los expertos predicen una mayor caída en las tasas de divorcio. En conjunto, podría ser que los estadounidenses se estén tomando el matrimonio más en serio y protegiendo la institución. 
Esto tiene todo el sentido porque el matrimonio es uno de los mayores compromisos que una persona puede asumir.

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