Documento desde la Asociación de Padres y Madres Separados de Euskadi (Kidetza)
GENERAL
La Federación de padres separados cree que es «una medida lógica»
M. J. T./BILBAO
La práctica totalidad de las modificaciones incorporadas a la normativa del Servicio vasco de Vivienda (Etxebide) fueron planteadas por la Federación de Padres y Madres Separados de Euskadi (Kidetza) que valora la «enorme sensibilidad y preocupación» de los responsables del Departamento, «con los que mantenemos una comunicación abierta y permanente».
A su juicio, la toma en consideración de las pensiones compensatorias para facilitar a los cónyuges que quedan desposeídos de vivienda es una medida «que entra dentro de la más pura lógica».
Pedro Diez, presidente la asociación vizcaína Abipase -integrada en Kidetza-, aseguró ayer que todas estas propuestas son «enormemente positivas. Abren una puerta a la esperanza en la reducción de la conflictividad y la protección del menor, ya que la vivienda es uno de los principales focos de conflicto».
La sociedad «debe tomar conciencia» de que los hijos de una pareja separada «necesitan dos casas y el pasillo es la calle», comparó Diez.
Pero, a su juicio, las iniciativas que facilitan el acceso a un piso protegido para estas familias deben ser reforzadas con otros beneficios fiscales, como por ejemplo incrementar las cantidades a deducir por hijo y por pensión alimenticia o posibilitar la declaración conjunta con la prole hasta los 23 años, entre otras.
Kidetza también propone la apertura de pisos de acogida, de carácter transitorio, para personas que «no tengan dónde ir» en el momento de la separación o bien que «para solicitar ayudas sociales de emergencia no haya que denunciar a la otra parte por maltrato, sino demostrar que existe una necesidad urgente».
Según los datos que baraja Kidetza, las separaciones y divorcios de parejas vascas han aumentado un 20% respecto a 2004. Un 65% de los procesos se cierran de mutuo acuerdo, mientras que el porcentaje de casos que llegan a los tribunales alcanza el 35%.
La pensión a la ex pareja no contará como ingresos para acceder a un piso protegido
El Gobierno vasco exigirá al solicitante de VPO una prueba documental de que paga la compensatoria. Etxebide endurece el castigo a quien renuncie a un piso
M. JOSÉ TOMÉ m.j.tome@diario-elcorreo.com/BILBAO.
LA FEDERACIÓN DE MADRES Y PADRES SEPARADOS-KIDETZA- CREE QUE ES «UNA MEDIDA LÓGICA»
Los padres o madres separados que pasen una pensión compensatoria a sus ex parejas y superen los ingresos máximos para poder optar a una vivienda protegida podrán descontar estas cantidades de su renta anual.
Ésta es una de las principales novedades que el Departamento vasco de Vivienda ha incorporado a Etxebide para discriminar de forma positiva a un colectivo social cada vez más numeroso y que puede quedar en grave precariedad económica tras una ruptura matrimonial.
Según fuentes de la consejería, las separaciones o divorcios se han duplicado desde 2001 al pasar de unas 2.000 anuales a 4.000.
Las modificaciones introducidas por el Departamento que dirige Javier Madrazo permiten ya que el cónyuge que deba abandone el domicilio familiar pueda participar en los sorteos de forma inmediata y no después de dos años; que tenga preferencia para optar a un piso de alquiler o que ambos miembros de la pareja rota puedan acceder a una vivienda de VPO tras vender su anterior casa, siempre y cuando el beneficio obtenido no supere los 75.000 euros, 3.000 más que antes.
A partir de junio, los responsables de Etxebide tendrán en cuenta además las pensiones compensatorias en el cálculo de ingresos para acceder a los sorteos de pisos protegidos.
«El objetivo -indicó el viceconsejero, Javier Dean- es ajustar la normativa a las necesidades cambiantes de la demanda».
Se trata, en definitiva, de prevenir «situaciones complejas, ligadas a menudo a la asignación de la custodia y la vivienda», los principales caballos de batalla en una separación.
El mecanismo, según avanzó Dean, será el siguiente: el ex cónyuge que tiene la obligación de pasar la pensión podrá restar esta cantidad de su renta anual a efectos de computar como posible beneficiario de un piso de protección.
Esta deducción le podrá permitir no superar los ingresos máximos de compra -33.000 en el caso de VPO- o de ciertos tipos de alquiler -21.000 euros de Bizigune o vivienda social-.
En todos los supuestos, deberá probar documentalmente que está abonando la pensión. Su ex pareja, entretanto, estará obligada a sumar las cantidades que reciba en su declaración de ingresos si pretende también participar en los sorteos de Etxebide.
Retrasos innecesarios
Javier Dean anunció asimismo el endurecimiento del castigo a los solicitantes que renuncien a los pisos adjudicados, con el fin de evitar gastos administrativos y retrasos innecesarios.
El viceconsejero recordó, en este sentido, que cuando una persona declina aceptar la vivienda que le ha correspondido se debe repetir el sorteo, circunstancia que demora las adjudicaciones y supone un contratiempo para quienes demandan un piso de manera «rigurosa» y «seria».
Así, los beneficiarios que renuncien dos veces en cualquiera de los programas de Etxebide serán excluidos automáticamente del registro durante dos años.
«Por esta vía, se ha dado de baja a 163 personas desde 2003», apuntó.También será motivo de exclusión una «renuncia tácita» derivada de no haber podido localizar a la persona demandante.
Los solicitantes de Etxebide «tienen la obligación tener actualizada la información de dirección postal y teléfono», advirtió.
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