viernes, 7 de octubre de 2022

Qué hace que la vida de soltero sea atractiva: ventajas de ser un 'single'

Aprovecha para conocerte y permitirte sentir y ser tú mismo
, ve a por lo que de verdad deseas y experimenta la vida de forma más intensa.
S. P.05 Oct 2022
Cada vez son más las personas que prefieren estar solteras en lugar de tener pareja. Aspectos como tener todo el tiempo del mundo para uno mismo, así como poder enfocarte en tus metas sin que nadie te distraiga son algunas de las ventajas que más se aprecian.
En un artículo publicado este año en la revista 'Ciencia Psicológica Evolutiva', Menelao Apostolou y Cristoforos Christoforou se preguntaron por las ventajas de estar soltero y por qué esta forma de vida es tan atractiva.

El «más tiempo para mí», «enfocarme en mis metas» y «nadie dicta mis acciones» fueron los beneficios más destacados por los participantes en el estudio. Por su parte, los hombres encontraron la «libertad para coquetear» más importante que las mujeres, mientras que estas consideraban de una mayor relevancia poderse enfocar en sus objetivos y no tener tensiones ni peleas.
Además, este hecho de poder enfocarse en los propios objetivos es también más valorado por los jóvenes que por los más mayores.

10 razones para seguir soltero
1. Estar soltera también puede traducirse en vivir sola, decorar la casa a tu gusto, no tener que dar explicaciones a nadie y vivir según tus costumbres.

2. Es un vehículo perfecto para la introspección. Y es ahí por donde debemos comenzar para conocernos a nosotros mismos.

3. Hay veces en las que, a causa (o por culpa) de nuestra pareja, descuidamos nuestras relaciones de amistad. Y estas son importantísimas en nuestra vida.

4. Encontrar pareja puede ser un proceso aburridísimo. Incluso hay quien dice que es como «buscar trabajo».

5. Aunque, por el contrario, las primeras citas pueden llegar a ser divertidas, además de una oportunidad para conocer a gente interesante, pasar un rato ameno y tener nuevas historias que contar a los amigos.

6. En muchos casos, el ver una serie sin esperar a tu pareja se considera una gran traición. Algunos cuentan que, por no poder esperar, ven un capítulo y más tarde fingen no haberlo hecho junto a su pareja. Si estás soltero, un problema menos. A disfrutar de las series cuando y como quieras.

7. Una parte importante de nuestro desarrollo personal es el refuerzo de la resiliencia. Y estando soltero, enfrentándote en el día a día a aquellos que te dicen «que se te va a pasar el arroz» y a los que te «juzgan» por tu soltería, aprendes a ser más fuerte y saber lidiar mejor con el día a día.

8. Tener pareja puede ser muy demandante en muchos planos, y uno de ellos es el económico. Si estás soltero puedes olvidarte y dejar de preocuparte por regalos de San Valentín, Navidad y pensar en planes para hacer con tu pareja normalmente caros.

9. Y no solo evitas gastar dinero, sino también conflictos y discusiones que, aunque no deben ser la norma en una pareja, muchas veces son inevitables. La soltería te regala paz y te quita quebraderos de cabeza.

10. Si no tienes pareja... ¡no tienes que romper con ella! Y es que una ruptura muchas veces supone un varapalo emocional del que nos cuesta reponernos. ¿Cuál es la mejor solución para un corazón roto? Que desde el principio, no haya opción de rotura.

«Se te va a pasar el arroz»
Expresiones como « se te va a pasar el arroz», «te vas a quedar para vestir santos» o «acabarás sola y rodeada de gatos» son tan chocantes como bochornosas. A las mujeres (sobre todo a ellas, aunque también les sucede a ellos) que no viven en pareja, no se casan o se han separado y no tienen una relación nueva se les sigue juzgando como si no estuvieran haciendo lo correcto, como si fuese un fracaso o como si esa soledad no hubiese sido realmente elegida de forma voluntaria. Sin embargo, tal como explica la psicóloga Silvia Congost, saber estar solo es indispensable y además es un signo de madurez, autonomía y riqueza personal.

Enfrentarse a los domingos por la tarde, al silencio de las noches sin llamadas, a las cenas en grupo en las que eres la única persona sin pareja, a los días de cine en solitario y a los «lo siento, ya he quedado» de algunos amigos puede verse de otra manera si, tal como propone Congost, vivimos con más consciencia y presencia.
«Aprovecha para conocerte y permitirte sentir y ser tú mismo, ve a por lo que de verdad deseas y experimenta la vida de forma más intensa», aconseja. La psicóloga, que es experta en autoestima, dependencia emocional y conflictos de pareja, destaca que cuando uno está solo, sus decisiones dependen solo de él, y eso da una libertad añadida que puede aportar mucho valor. «Al estar en pareja renunciamos a muchas cosas por adaptarnos al otro. De hecho, en la vida estamos eligiendo y renunciando constantemente», añade.

Anuptafobia
A pesar de todas estas ventajas, hay personas que tienen miedo a la soledad. Y cuando hablamos de estar solos nos referimos al sentido literal de la palabra: tener miedo a no estar en constante compañía, guardan una baja autoestima y una fuerte inseguridad. 
Esto lleva a muchos, irremediablemente, a buscar pareja cuando la anterior relación no les ha funcionado, porque la compañía de las amistades y familia se les queda corta.

Los que padecen anuptafobia, como se conoce a este miedo irracional, asocian la soledad a emociones muy negativas como la tristeza, el rechazo, el abandono o la melancolía, y sienten un gran vacío emocional que no pueden afrontar y, en consecuencia, no saben ni quieren estar solas.
«Tener al lado a una persona es muy bonito, pero esta gente se va a un punto extremo, es decir, se convierte en una fobia y son capaces de aferrarse a cualquier tipo de relación con tal de no estar solteros», alerta la psicóloga Lara Ferreiro. «Yo siempre digo que tener pareja es una de las experiencias más bonitas que tenemos los seres humanos pero, al final, engancharte a relaciones amorosas por miedo a estar solteros puede ser muy tóxico para uno mismo».

Para perder el miedo a estar soltero, 1º es necesario descubrir las razones de ese temor, ya que son la base desde la que empezar a trabajar. Lo habitual es que el origen esté en la baja autoestima, la inseguridad, el miedo a la soledad, las creencias limitantes, los condicionamientos sociales y la dependencia emocional, pero podría haber otras menos evidentes.
Una vez que se hacen conscientes esas razones, hay que dar herramientas a la persona para que alcance la fortaleza emocional necesaria para confrontar ese miedo y superarlo.

No hay comentarios: