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Rafa Garcia Rico 10/02/2015El Gobierno no presentará en esta legislatura la Ley de Custodia
Compartida. La ley lleva pendiente desde 2013, y no está en las
previsiones del ministerio de Justicia su tramitación parlamentaria.
Esta ley es un compromiso electoral del PP; además, UPyD, especialmente,
su portavoz en estos asuntos, Toni Cantó, forzó el compromiso del
anterior ministro de Justicia, Alberto Ruíz-Gallardón, para aprobarla.
Pero es un texto demasiado controvertido y todo indica que dormirá en algún cajón. El ministro de Justicia, Rafael Catalá, aseguró en el Congreso que no existe ningún anteproyecto, sólo “borradores de trabajo” que se están discutiendo con los sectores sociales implicados, pero que no consigue ninguna formula aceptable entre las organizaciones de mujeres que se han manifestado en reiteradas ocasiones en contra y los padres procustodia. Y el gobierno que no quiere un nuevo frente, al no existir un acuerdo, no tramitará la Ley.
El PSOE por su parte, alertaba de que la custodia compartida era peligrosa al poner en riesgo a los menores y a las mujeres víctimas de violencia de género por permitir que el maltratador, pueda obtener la custodia..
¿ En qué consiste la custodia compartida?
En caso de separación o divorcio, ambos progenitores compartirían, en igualdad de condiciones los deberes y la custodia legal de los hijos menores de edad. Esto es, compartir las decisiones sobre el lugar de residencia, a qué colegio irá el menor, médico, y todos aquellos asuntos que le afectan. La diferencia con la patria potestad es que sin custodia, la patria potestad se queda en nada, ya que el verdadero poder de decisión se establece en la custodia. (Metedura de pata. Es todo a la inversa,como dice el TS)
La custodia lleva implícito compartir los gastos, así como el uso de la vivienda familiar. Cuando la custodia pertenece a uno solo de los progenitores, a él le corresponde el uso de la vivienda familiar y administrar la manutención que recibe el niño.
¿Cuales son los argumentos de las partes sobre la custodia compartida?
El colectivo de padres procustodia exigen que la custodia compartida se determine con carácter general y acusan al gobierno de incumplir otra promesa electoral. Además, acusan al PP de tener distintas regulaciones en las comunidades autónomas, ya que Aragón y Valencia sí han desarrollado su legislación. Acusan al ministro de no reunirse con ellos ni de responder a sus propuestas.
La custodia compartida es la manera de evitar la costumbre que da prioridad a las madres con respectos a los hijos, y las partes enfrentadas, madres y padres, mantienen posiciones muy radicales en relación a la determinación de la manutención, y al régimen económico y fiscal.
Las organizaciones de mujeres por su parte, aseguran que no pretenden la custodia en exclusiva para las madres, pero sí que en ningún caso se pueda imponer la custodia si no es por voluntad y mutuo acuerdo de las partes. Abogan por una custodia compartida solo si así se acuerda y se negocian las condiciones.
Además, según los datos que se manejan, la solicitud por parte de los padres es muy baja, apenas el 8%, por lo que niegan el argumento de la “denegación sistemática”
Y por último, aseguran que actualmente los tribunales pueden dictaminarla si existe informe favorable del ministerio fiscal, que siempre actúa en los procedimientos como parte cuando hay menores.
Pero hay dos argumentos más y muy importantes: todavía no se han resuelto los incumplimientos en relación a las pensiones de alimentos y compensatorias y del régimen de visitas que se convierte en un auténtico calvario judicial para muchas mujeres. Y especialmente, en los casos de violencia de género y agresiones.
¿Qué está pasando en los tribunales con la custodia compartida?
Una reciente sentencia del Tribunal Supremo ha vuelto a poner el asunto en la opinión publica. La sentencia exige que haya una buena relación entre los progenitores para conceder la custodia compartida de los hijos, “no ha lugar si hay conflictividad entre la pareja”. Vino así a matizar la sentencia de mayo de 2013 en la que defendía la custodia compartida como “la mejor solución”
En todo caso, ya estaba siendo así en muchos tribunales, donde se estudia con criterios técnicos tanto el lugar de residencia, como la comunicación y relación entre los padres, y son los propios juzgados de familia quienes promueven “el entendimiento” entre las partes.
Pero es un texto demasiado controvertido y todo indica que dormirá en algún cajón. El ministro de Justicia, Rafael Catalá, aseguró en el Congreso que no existe ningún anteproyecto, sólo “borradores de trabajo” que se están discutiendo con los sectores sociales implicados, pero que no consigue ninguna formula aceptable entre las organizaciones de mujeres que se han manifestado en reiteradas ocasiones en contra y los padres procustodia. Y el gobierno que no quiere un nuevo frente, al no existir un acuerdo, no tramitará la Ley.
El PSOE por su parte, alertaba de que la custodia compartida era peligrosa al poner en riesgo a los menores y a las mujeres víctimas de violencia de género por permitir que el maltratador, pueda obtener la custodia..
¿ En qué consiste la custodia compartida?
En caso de separación o divorcio, ambos progenitores compartirían, en igualdad de condiciones los deberes y la custodia legal de los hijos menores de edad. Esto es, compartir las decisiones sobre el lugar de residencia, a qué colegio irá el menor, médico, y todos aquellos asuntos que le afectan. La diferencia con la patria potestad es que sin custodia, la patria potestad se queda en nada, ya que el verdadero poder de decisión se establece en la custodia. (Metedura de pata. Es todo a la inversa,como dice el TS)
La custodia lleva implícito compartir los gastos, así como el uso de la vivienda familiar. Cuando la custodia pertenece a uno solo de los progenitores, a él le corresponde el uso de la vivienda familiar y administrar la manutención que recibe el niño.
¿Cuales son los argumentos de las partes sobre la custodia compartida?
El colectivo de padres procustodia exigen que la custodia compartida se determine con carácter general y acusan al gobierno de incumplir otra promesa electoral. Además, acusan al PP de tener distintas regulaciones en las comunidades autónomas, ya que Aragón y Valencia sí han desarrollado su legislación. Acusan al ministro de no reunirse con ellos ni de responder a sus propuestas.
La custodia compartida es la manera de evitar la costumbre que da prioridad a las madres con respectos a los hijos, y las partes enfrentadas, madres y padres, mantienen posiciones muy radicales en relación a la determinación de la manutención, y al régimen económico y fiscal.
Las organizaciones de mujeres por su parte, aseguran que no pretenden la custodia en exclusiva para las madres, pero sí que en ningún caso se pueda imponer la custodia si no es por voluntad y mutuo acuerdo de las partes. Abogan por una custodia compartida solo si así se acuerda y se negocian las condiciones.
Además, según los datos que se manejan, la solicitud por parte de los padres es muy baja, apenas el 8%, por lo que niegan el argumento de la “denegación sistemática”
Y por último, aseguran que actualmente los tribunales pueden dictaminarla si existe informe favorable del ministerio fiscal, que siempre actúa en los procedimientos como parte cuando hay menores.
Pero hay dos argumentos más y muy importantes: todavía no se han resuelto los incumplimientos en relación a las pensiones de alimentos y compensatorias y del régimen de visitas que se convierte en un auténtico calvario judicial para muchas mujeres. Y especialmente, en los casos de violencia de género y agresiones.
¿Qué está pasando en los tribunales con la custodia compartida?
Una reciente sentencia del Tribunal Supremo ha vuelto a poner el asunto en la opinión publica. La sentencia exige que haya una buena relación entre los progenitores para conceder la custodia compartida de los hijos, “no ha lugar si hay conflictividad entre la pareja”. Vino así a matizar la sentencia de mayo de 2013 en la que defendía la custodia compartida como “la mejor solución”
En todo caso, ya estaba siendo así en muchos tribunales, donde se estudia con criterios técnicos tanto el lugar de residencia, como la comunicación y relación entre los padres, y son los propios juzgados de familia quienes promueven “el entendimiento” entre las partes.
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