El mundo de los divorcios es más extraño de lo que creías: ¿sabías que trabajar como barman aumenta las posibilidades de ruptura? ¿O que los famosos prefieren divorciarse los viernes por la tarde?
En la antigüedad los divorcios también tenían sus peculiaridades: los Incas por ejemplo practicaban el matrimonio de pruebas: estaban unos años juntos y, si a alguno no le gustaba la situación, se separaban sin problemas.
Cuando piensas en divorcios, seguramente te vienen a la mente imágenes negativas.
Al fin y al cabo una ruptura amorosa no hace gracia a nadie. Ahora bien, el mundo del divorcio tiene suficientes peculiaridades con la capacidad de al menos despertar tu asombro y entretenerte durante un rato.
Aquí tienes 9 curiosidades que cambiarán tu perspectiva sobre el desenlace trágico del amor.
1. El Hotel del Divorcio
Muchos estadounidenses van a Saratoga Sprints (Nueva York) a pasar un fin de semana romántico. Pero desde hace unos años, cierto porcentaje de parejas llega a Saratoga un viernes, casados, y salen el domingo legalmente separados.
El Gideon Putnam Resort & Spa se le conoce mejor por su sobrenombre: el Hotel del Divorcio. Una pareja que quiera separarse, y que quiera acabar de buenas, puede pagar algunos de sus paquetes que incluyen, entre otras cosas, un abogado especializado para cada uno y un mediador para salir del Spa con los papeles del divorcio en regla.
“Entras casado, sale soltero: es magia”, explica para el New York Post Raoul Felder, abogado especialista en divorcios que forma parte de la plantilla del Hotel del Divorcio.
Un gran acierto del Gideon son sus tarifas económicas en comparación con lo que puede costar una separación en Estados Unidos: en la propia ciudad de Nueva York, separarse puede significar un anticipo de hasta 25.000 dólares (un poco más de 20.500 euros). En el Hotel del Divorcio, por 5.000 dólares (poco más de 4.000 euros), la pareja tiene dormitorios separados, abogados…
Además, en época de coronavirus, el Hotel del Divorcio se ha adaptado y ofrece mediaciones online.
2. Los primeros divorcios de la Historia
Los 1º papeles de un divorcio se han encontrado en tablillas de arcilla que pertenecían a la antigua Mesopotamia y que se remontan al 2000 a.C.
En aquel entonces, el divorcio era un proceso legal en el que solían participar el marido y el padre de la esposa.
Para confirmar la boda, el pretendiente llegaba a un acuerdo con su futuro suegro. Se estipulaba que la esposa valía un precio determinado y su padre le otorgaba dicha cantidad al marido. A cambio, este debía garantizar una cantidad de hijos en un margen de tiempo acordado. Si no se obtenía dicha cantidad, o no se cumplían otras condiciones, tanto la esposa como su valor económico regresaban a la familia de la mujer.
3. Cuanto más cara sea una boda, más rápido llegará el divorcio
¿Quieres que tu inminente matrimonio dure todo lo posible? Pues recorta un poco el presupuesto de la boda.
Un estudio reciente (vía Insider), a cargo de los profesores de economía Andrew Francis-Tan y Hugo M Mialon, descubrió que gastar más de 20.000 dólares (poco más de 16.500 euros) en la boda y entre 2.000 y 4.000 dólares (1.600-3.300 euros) en los anillos de boda incrementa el riesgo de un divorcio cercano.
¿La relación entre boda cara y divorcio posible? Los 2 profesores creen que una boda de alto presupuesto indica que al menos alguien en la pareja prioriza su imagen exterior a cualquier otra cosa.
Para confirmar la boda, el pretendiente llegaba a un acuerdo con su futuro suegro. Se estipulaba que la esposa valía un precio determinado y su padre le otorgaba dicha cantidad al marido. A cambio, este debía garantizar una cantidad de hijos en un margen de tiempo acordado. Si no se obtenía dicha cantidad, o no se cumplían otras condiciones, tanto la esposa como su valor económico regresaban a la familia de la mujer.
3. Cuanto más cara sea una boda, más rápido llegará el divorcio
¿Quieres que tu inminente matrimonio dure todo lo posible? Pues recorta un poco el presupuesto de la boda.
Un estudio reciente (vía Insider), a cargo de los profesores de economía Andrew Francis-Tan y Hugo M Mialon, descubrió que gastar más de 20.000 dólares (poco más de 16.500 euros) en la boda y entre 2.000 y 4.000 dólares (1.600-3.300 euros) en los anillos de boda incrementa el riesgo de un divorcio cercano.
¿La relación entre boda cara y divorcio posible? Los 2 profesores creen que una boda de alto presupuesto indica que al menos alguien en la pareja prioriza su imagen exterior a cualquier otra cosa.
Este tipo de comportamiento superficial acaba produciendo choques más temprano que tarde.
En cambio, una luna de miel por todo lo alto produce el efecto contrario: aumenta las posibilidades de un matrimonio feliz. Eso se debe a que la pareja prioriza su bienestar y considera que su relación es una inversión en la que vale la pena no reparar en gastos.
(Aunque, bueno, las bodas en tiempo de cuarentena evitan que se lleguen a las cifras del estudio)
4. Los matrimonios de prueba incas
En la antigua civilización Inca, existían los llamados matrimonios de prueba. El hombre y la mujer llegaban a un acuerdo: permanecer casados durante unos pocos años (la cantidad de años variaba según la pareja). Cuando acababa el plazo, se hacía un balance.
Si cualquiera de los 2 se sentía insatisfecho, el matrimonio de prueba terminaba. La mujer podía regresar a casa de sus padres si la relación no le gustaba, o el marido podía echarla de casa. No obstante, si ambos estaban satisfechos, el matrimonio pasaba a ser irrompible salvo si se descubría que la mujer no podía tener hijos.
5. Los wakaresaseya, los saboteadores del amor
La sociedad japonesa es reacia a los enfrentamientos y a los conflictos.
En cambio, una luna de miel por todo lo alto produce el efecto contrario: aumenta las posibilidades de un matrimonio feliz. Eso se debe a que la pareja prioriza su bienestar y considera que su relación es una inversión en la que vale la pena no reparar en gastos.
(Aunque, bueno, las bodas en tiempo de cuarentena evitan que se lleguen a las cifras del estudio)
4. Los matrimonios de prueba incas
En la antigua civilización Inca, existían los llamados matrimonios de prueba. El hombre y la mujer llegaban a un acuerdo: permanecer casados durante unos pocos años (la cantidad de años variaba según la pareja). Cuando acababa el plazo, se hacía un balance.
Si cualquiera de los 2 se sentía insatisfecho, el matrimonio de prueba terminaba. La mujer podía regresar a casa de sus padres si la relación no le gustaba, o el marido podía echarla de casa. No obstante, si ambos estaban satisfechos, el matrimonio pasaba a ser irrompible salvo si se descubría que la mujer no podía tener hijos.
5. Los wakaresaseya, los saboteadores del amor
La sociedad japonesa es reacia a los enfrentamientos y a los conflictos.
En el caso de los divorcios, en ocasiones un miembro puede temer tanto la reacción de su pareja cuando le diga que quiere separarse que preferirá otra alternativa: contratar a alguien para que sabotee la relación.
Los wakaresaseya son un tipo de detectives privados que aceptan encargos muy: conseguir que la pareja del cliente se enamore de ellos.
Los wakaresaseya son un tipo de detectives privados que aceptan encargos muy: conseguir que la pareja del cliente se enamore de ellos.
De esta forma, el o la cliente lo tendrá más fácil para pedir el divorcio. “Tu marido o esposa tenderá a aceptar más un divorcio si se ha enamorado de alguien más”, explica para BBC Stephanie Scott, escritora cuya novela "What’s Left of Me Is Yours" se inspira en los wakaresaseya.
Pero, atención, porque las peticiones habituales para un wakaresaseya se parecen a melodramas venezolanos: en muchas ocasiones su objetivo es romper con un affaire ya existente en lugar de crear uno.
Allá va un ejemplo rocambolesco. Si lo entiendes a la 1ª, tienes premio.
Sakura es una clienta que cree que su marido, Yukito, está teniendo una relación con alguien. Así que contrata a Mochi para que investigue. Mochi se empapa de la vida de Yukito hasta al más mínimo detalle y descubre que, en efecto, Yukito tiene una amante llamada Mai.
Ahora viene el 1º giro de tuerca: Mochi se acerca a Yukito para descubrir cómo hacerse amigo a Mai. Cuando logra contactar con ella, Mochi pide ayuda de una detective, Eri, que se hace súper amiga de Mai para descubrir su gusto por los hombres.
A continuación, Mochi y Eri buscan entre sus contactos al wakaresaseya más adecuado para que enamore a Mai, amante de Yukito. Este 3º agente, Toya, se acerca a Mai sin que lo sepa Yukito, la seduce y Mai deja de ser amante de Yukito.
Y Sakura, la clienta original, está contenta porque su marido ya no le pone los cuernos.
Han hecho falta 3 agentes en total y seguramente entre 4 y 6 meses para labrarse la confianza del marido y de su amante. ¡Vaya tela!
6. Los trabajos con mayor riesgo de divorcio
Mucha gente, en la fase de ligoteo, pregunta por el trabajo de su posible pareja. Normalmente, el objetivo es saber cuánto gana o si su trabajo es estable.
Pues bien: hay un estudio que indirectamente anima a seguir preguntando por el trabajo, pero por motivos diferentes. Y es que en 2015, la empresa de análisis Flowing Data descubrió la lista de trabajos con más posibilidades de conllevar un divorcio (vía Monster).
¿Qué relación hay entre un trabajo y el posible divorcio? Cuanto más riesgos diarios conlleve un trabajo, más dañará el bienestar mental del trabajador, y más posibilidades habrá de que se traiga el mal rollo a casa.
Hay otros casos, como el trabajo de piloto de avión comercial, con también riesgo de divorcio, pero por otro motivo: el estilo de vida que impone el trabajo dificulta que la pareja pueda relacionarse a diario. Eso provoca desencanto, malos roces, malestar…
Así que la próxima vez que preguntes por el trabajo, ten cuidado con estos oficios, ¡son los que tienen más posibilidades de romper una pareja!
Gerentes de casinos o salas de juego ― 52.9% de divorcio
Bármanes ― 52.7%
Asistentes de vuelo ― 50.5%
Trabajador en casinos o salas de juego ― 50.3%
Operadores de rodillos de laminación ― 50.1%
Operadores de paneles eléctricos ― 49.7%
Operadores de maquinaria de dibujo ― 49.7%
Teleoperadores de marketing ― 49.2%
Operadores de máquinas textiles ― 48.9%
Operadores de maquinaria de prensa o de proceso de compactación ― 48.8%
Por contra, aquí tienes los 10 trabajos con menos posibilidades de divorcio:
Aseguradores ― 17%
Científicos físicos ― 18.9%
Científicos especializados en medicina y salud ― 19.6%
Clérigos ― 19.8%
Desarrolladores de software ― 20.3%
Terapeutas ― 20.7%
Optometristas ― 20.8%
Ingenieros químicos ― 21.1%
Directores de educación o religión ― 21.3%
Cirujanos ― 21.8%
7. El divorcio más exprés de todos.
No existe un divorcio más exprés que el de las mujeres aborígenes australianas. Mientras que en otras culturas se pueden invertir años y dinero en una separación, ellas si desean divorciarse para casarse con un hombre mejor, solo tienen que decir “sí, quiero” a su 2º marido. Si no hay plan B, una mujer puede preguntarle a su marido si quiere el divorcio. Si dice “sí”, el matrimonio acaba inmediatamente.
8. Los divorcios de los famosos, un mundo a parte.
Los divorcios entre famosos tienen sus propias reglas. Lo explicó en su día para Elle Laura Wasser, abogada de Los Ángeles que ha llevado las separaciones de famosas como Jennifer Garner o Gwen Stefani.
Wasser revela por ejemplo que muchas de las peticiones de divorcio entre famosos suelen ocurrir los viernes por la tarde, sobre todo si es la antesala de un fin de semana festivo (por ejemplo, el domingo es 25 de diciembre).
¿La razón? Los medios están demasiado ocupados preparando contenido temático para las festividades o bien la gran mayoría de sus periodistas están de vacaciones. Así es menos probable que un periodista se dé cuenta del divorcio.
Y es que en California, es perfectamente legal que cualquier acceda a la petición de divorcio de una pareja, haga copias y pueda distribuirlo. Así que muchos gabinetes de abogados suelen hacer las veces de soplones de la prensa amarillista cada vez que alguien famoso pisa sus oficinas.
Pero, atención, porque las peticiones habituales para un wakaresaseya se parecen a melodramas venezolanos: en muchas ocasiones su objetivo es romper con un affaire ya existente en lugar de crear uno.
Allá va un ejemplo rocambolesco. Si lo entiendes a la 1ª, tienes premio.
Sakura es una clienta que cree que su marido, Yukito, está teniendo una relación con alguien. Así que contrata a Mochi para que investigue. Mochi se empapa de la vida de Yukito hasta al más mínimo detalle y descubre que, en efecto, Yukito tiene una amante llamada Mai.
Ahora viene el 1º giro de tuerca: Mochi se acerca a Yukito para descubrir cómo hacerse amigo a Mai. Cuando logra contactar con ella, Mochi pide ayuda de una detective, Eri, que se hace súper amiga de Mai para descubrir su gusto por los hombres.
A continuación, Mochi y Eri buscan entre sus contactos al wakaresaseya más adecuado para que enamore a Mai, amante de Yukito. Este 3º agente, Toya, se acerca a Mai sin que lo sepa Yukito, la seduce y Mai deja de ser amante de Yukito.
Y Sakura, la clienta original, está contenta porque su marido ya no le pone los cuernos.
Han hecho falta 3 agentes en total y seguramente entre 4 y 6 meses para labrarse la confianza del marido y de su amante. ¡Vaya tela!
6. Los trabajos con mayor riesgo de divorcio
Mucha gente, en la fase de ligoteo, pregunta por el trabajo de su posible pareja. Normalmente, el objetivo es saber cuánto gana o si su trabajo es estable.
Pues bien: hay un estudio que indirectamente anima a seguir preguntando por el trabajo, pero por motivos diferentes. Y es que en 2015, la empresa de análisis Flowing Data descubrió la lista de trabajos con más posibilidades de conllevar un divorcio (vía Monster).
¿Qué relación hay entre un trabajo y el posible divorcio? Cuanto más riesgos diarios conlleve un trabajo, más dañará el bienestar mental del trabajador, y más posibilidades habrá de que se traiga el mal rollo a casa.
Hay otros casos, como el trabajo de piloto de avión comercial, con también riesgo de divorcio, pero por otro motivo: el estilo de vida que impone el trabajo dificulta que la pareja pueda relacionarse a diario. Eso provoca desencanto, malos roces, malestar…
Así que la próxima vez que preguntes por el trabajo, ten cuidado con estos oficios, ¡son los que tienen más posibilidades de romper una pareja!
Gerentes de casinos o salas de juego ― 52.9% de divorcio
Bármanes ― 52.7%
Asistentes de vuelo ― 50.5%
Trabajador en casinos o salas de juego ― 50.3%
Operadores de rodillos de laminación ― 50.1%
Operadores de paneles eléctricos ― 49.7%
Operadores de maquinaria de dibujo ― 49.7%
Teleoperadores de marketing ― 49.2%
Operadores de máquinas textiles ― 48.9%
Operadores de maquinaria de prensa o de proceso de compactación ― 48.8%
Por contra, aquí tienes los 10 trabajos con menos posibilidades de divorcio:
Aseguradores ― 17%
Científicos físicos ― 18.9%
Científicos especializados en medicina y salud ― 19.6%
Clérigos ― 19.8%
Desarrolladores de software ― 20.3%
Terapeutas ― 20.7%
Optometristas ― 20.8%
Ingenieros químicos ― 21.1%
Directores de educación o religión ― 21.3%
Cirujanos ― 21.8%
7. El divorcio más exprés de todos.
No existe un divorcio más exprés que el de las mujeres aborígenes australianas. Mientras que en otras culturas se pueden invertir años y dinero en una separación, ellas si desean divorciarse para casarse con un hombre mejor, solo tienen que decir “sí, quiero” a su 2º marido. Si no hay plan B, una mujer puede preguntarle a su marido si quiere el divorcio. Si dice “sí”, el matrimonio acaba inmediatamente.
8. Los divorcios de los famosos, un mundo a parte.
Los divorcios entre famosos tienen sus propias reglas. Lo explicó en su día para Elle Laura Wasser, abogada de Los Ángeles que ha llevado las separaciones de famosas como Jennifer Garner o Gwen Stefani.
Wasser revela por ejemplo que muchas de las peticiones de divorcio entre famosos suelen ocurrir los viernes por la tarde, sobre todo si es la antesala de un fin de semana festivo (por ejemplo, el domingo es 25 de diciembre).
¿La razón? Los medios están demasiado ocupados preparando contenido temático para las festividades o bien la gran mayoría de sus periodistas están de vacaciones. Así es menos probable que un periodista se dé cuenta del divorcio.
Y es que en California, es perfectamente legal que cualquier acceda a la petición de divorcio de una pareja, haga copias y pueda distribuirlo. Así que muchos gabinetes de abogados suelen hacer las veces de soplones de la prensa amarillista cada vez que alguien famoso pisa sus oficinas.
Es por eso que Wasser siempre recomienda a sus clientes que o esperen a los viernes o se vayan temporalmente de Hollywood para tramitar el divorcio en otro estado.
Otro dato de esta abogada especializada: cuando llegue marzo, fíjate en cómo de repente sube la tasa de divorcios en el mundo del famoseo. Eso se debe a que ya han terminado los Óscars y los actores no tendrán que enfrentarse a la dura situación de caminar por la alfombra roja en soledad.
9. Utilizar Facebook aumenta las posibilidades de divorcio
¿Utilizas mucho Facebook? Pues que sepas que su uso aumenta las posibilidades de divorcio según un estudio reciente a cargo de Russell Clayton, de la Universidad de Hawaii.
Clayton hipotetizó que muchas personas aprovecharían redes sociales como Facebook para vigilar a su pareja, y que esta obsesión peligrosa podría llevar a malentendidos, broncas, brotes de celos y, finalmente, divorcios.
El estudio acabó corroborando dicha hipótesis. Clayton no solo verificó que, en efecto, hay personas celosas que vigilan demasiado a sus parejas, sino que además descubrió algo que no había tenido en cuenta: la capacidad de Facebook de reconectar viejas amistades… y viejos amores.
Y es que hay personas que reconectan con amores del pasado, y eso provoca affaires, más celos, más problemas y más rupturas.
El estudio recomienda mesura a la hora de utilizar las redes sociales, no solo Facebook. Es mejor autocensurarse y prohibirse usar Facebook para espiar a la pareja.
El mito es desgraciadamente cierto: las relaciones amorosas suelen tener una fecha de caducidad. En un artículo para el Psychology Today, la terapeuta Theresa E. DioDonato ahonda en el mito que asegura que el amor dura 7 años de media, y que a partir de ahí aumentan las posibilidades de divorcio.
Su respuesta es aún más inquietante: la fecha de caducidad no son 7 años, ¡son entre 4 ó 5!
“Aunque la gente habla del desgaste de los 7 años, las tasas de divorcio aumentan históricamente alrededor de los 4-5 años. La bióloga Helen Fisher cree que tiene sentido desde una perspectiva evolucionaría”.
“Durante el transcurso de la historia de la humanidad, las mujeres que cambian de pareja tras 4 años (suficientes para que los 2 puedan sobrellevar los 1º años duros de 1 ó 2 hijos) tienen una ventaja adaptativa. Y es que al juntarse con otra pareja, pueden variar los genes de sus hijos, multiplicando las posibilidades de supervivencia. Puede que los 4 años de media de parejas actuales sean herencia de esta forma de vivir”.
Otro dato de esta abogada especializada: cuando llegue marzo, fíjate en cómo de repente sube la tasa de divorcios en el mundo del famoseo. Eso se debe a que ya han terminado los Óscars y los actores no tendrán que enfrentarse a la dura situación de caminar por la alfombra roja en soledad.
9. Utilizar Facebook aumenta las posibilidades de divorcio
¿Utilizas mucho Facebook? Pues que sepas que su uso aumenta las posibilidades de divorcio según un estudio reciente a cargo de Russell Clayton, de la Universidad de Hawaii.
Clayton hipotetizó que muchas personas aprovecharían redes sociales como Facebook para vigilar a su pareja, y que esta obsesión peligrosa podría llevar a malentendidos, broncas, brotes de celos y, finalmente, divorcios.
El estudio acabó corroborando dicha hipótesis. Clayton no solo verificó que, en efecto, hay personas celosas que vigilan demasiado a sus parejas, sino que además descubrió algo que no había tenido en cuenta: la capacidad de Facebook de reconectar viejas amistades… y viejos amores.
Y es que hay personas que reconectan con amores del pasado, y eso provoca affaires, más celos, más problemas y más rupturas.
El estudio recomienda mesura a la hora de utilizar las redes sociales, no solo Facebook. Es mejor autocensurarse y prohibirse usar Facebook para espiar a la pareja.
El mito es desgraciadamente cierto: las relaciones amorosas suelen tener una fecha de caducidad. En un artículo para el Psychology Today, la terapeuta Theresa E. DioDonato ahonda en el mito que asegura que el amor dura 7 años de media, y que a partir de ahí aumentan las posibilidades de divorcio.
Su respuesta es aún más inquietante: la fecha de caducidad no son 7 años, ¡son entre 4 ó 5!
“Aunque la gente habla del desgaste de los 7 años, las tasas de divorcio aumentan históricamente alrededor de los 4-5 años. La bióloga Helen Fisher cree que tiene sentido desde una perspectiva evolucionaría”.
“Durante el transcurso de la historia de la humanidad, las mujeres que cambian de pareja tras 4 años (suficientes para que los 2 puedan sobrellevar los 1º años duros de 1 ó 2 hijos) tienen una ventaja adaptativa. Y es que al juntarse con otra pareja, pueden variar los genes de sus hijos, multiplicando las posibilidades de supervivencia. Puede que los 4 años de media de parejas actuales sean herencia de esta forma de vivir”.
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