La estrella más histriónica de Sálvame apenas podía articular palabra el pasado 26 de diciembre. Su tristeza se debía a la desaparición de su esposo, que le ha obligado a comerse el turrón sola. No obstante, rentabilizará su amargura en una visita al Deluxe.
"Karmele Marchante es la colaboradora que ha pasado estas Navidades sin su marido. Creo que el titular es que estás viviendo ahora mismo un cese temporal de la convivencia. Me gustaría que en este momento abandonases el plató para que preservases la exclusiva y que tus compañeros no te acribillen a preguntas", aseguraba Carlota Corredera, directora de Sálvame Deluxe.
Como cabía esperar, nadie se solidarizó con la apesadumbrada Karmele. Mila Ximénez y Belén Esteban fueron las más beligerantes con la otrora diva de Tómbola, que hasta hace poco no permitía que hablaran de su vida privada.
Os puedo dar 2 titulares que creo que son los más duros: se siente abandonada y decepcionada (...) En estos momentos la propia Karmele no conoce el paradero de Diego, no sabe donde está", añadía Corredera.
Lo cierto es que Karmele ha perdido mucho protagonismo en Sálvame. No trae casi nunca información contrastada y ni siquiera se presta a hacer numeritos como antes. Por ello, quizás su último recurso para seguir en el candelero sea vender su supuesto desamor.
[Noticia: El topless de Karmele]
La directora de Sálvame Deluxe pidió "un voto de confianza" para Karmele, ya que cabe la posibilidad de que venda su vida no solo "por dinero". En pocas horas toda España conocerá quién es realmente "Pichurrín" y por qué se ha ido del domicilio conyugal.
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