estrelladigital.es/22/08/18
Los menores son la parte más débil y algunas decisiones relacionadas con el divorcio, como la elección de la guarda y custodia, puede afectar a su crecimiento y a su vida diaria de forma notable.
Así, la custodia compartida está ganando mucha importancia en España debido a que supone que ambos progenitores tendrán el derecho a convivir con los hijos tras su separación o divorcio.
Algunas regiones, como Aragón, la Comunidad Valenciana, Euskadi, Navarra y Cataluña, a través de sus leyes forales y otras legislaciones propias han establecido prioridad a la custodia compartida frente a la monoparental, siendo ya la opción principal.
Según nos cuenta Elena Crespo, abogada de familia en Barcelona, “poco a poco las leyes y los usos se han modificado hasta llegar a un punto en que la custodia compartida es ya la solución preferida. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el punto de partida es siempre proteger el interés superior del menor”.
Esto significa que, “aunque la custodia compartida es ahora la fórmula que debe aplicarse prioritariamente según la jurisprudencia del Tribunal Supremo, ello no excluye en absoluto optar por la custodia monoparental cuando las circunstancias así lo requieran”.
De hecho, la custodia monoparental (que se otorga generalmente a la madre) sigue siendo la más frecuente, ya que se requieren una serie de circunstancias concretas que veremos a continuación para poder aplicar la custodia compartida.
Requisitos para otorgar la custodia compartida
Siempre con la intención de proteger al menor, en la actualidad basta con que uno de los cónyuges o bien el propio juez solicite la custodia compartida para que se tenga en consideración esta posibilidad.
Ahora bien, no todas las parejas pueden acceder a este tipo de custodia, ya que se debe atender a una serie de criterios para poder otorgarla.
En este sentido, un 1º requisito para otorgar la custodia compartida es la relación entre los progenitores. “Los jueces tendrán muy en cuenta la relación existente entre los cónyuges, ya que si no existe buena relación difícilmente se puede compartir algo y menos un hijo”, como explica Juan Ignacio Oñós, de Jionos Abogados.
A la hora de otorgar una custodia compartida es importante que los progenitores tengan una relación lo más cordial posible. Además, si uno de los cónyuges está inmerso en un proceso penal iniciado por atentar contra la libertad física, psíquica, la integridad moral o la libertad e indemnidad sexual del otro cónyuge, entonces la custodia compartida no podrá ser solicitada.
También hay que destacar que el Ministerio Fiscal o cualquiera de las partes podrá solicitar un informe al equipo psicosocial del Juzgado. Dicho informe será tenido en cuenta por el Juez a la hora otorgar la guarda y custodia.
Otros aspectos que se tienen en cuenta son “los deseos manifestados por los menores competentes” como indica Elena Crespo, así como “el número de hijos, el cumplimiento por parte de los progenitores de sus deberes y el respeto mutuo en sus relaciones personales, la ubicación de sus domicilios y sus horarios, y el resultado de todos los informes exigidos legalmente”.
Si quieres saber más sobre cómo hacer frente a un divorcio sin perjudicar a los hijos, además de elegir un tipo de custodia compartida existen otros consejos que puedes encontrar aquí.
De hecho, la custodia monoparental (que se otorga generalmente a la madre) sigue siendo la más frecuente, ya que se requieren una serie de circunstancias concretas que veremos a continuación para poder aplicar la custodia compartida.
Requisitos para otorgar la custodia compartida
Siempre con la intención de proteger al menor, en la actualidad basta con que uno de los cónyuges o bien el propio juez solicite la custodia compartida para que se tenga en consideración esta posibilidad.
Ahora bien, no todas las parejas pueden acceder a este tipo de custodia, ya que se debe atender a una serie de criterios para poder otorgarla.
En este sentido, un 1º requisito para otorgar la custodia compartida es la relación entre los progenitores. “Los jueces tendrán muy en cuenta la relación existente entre los cónyuges, ya que si no existe buena relación difícilmente se puede compartir algo y menos un hijo”, como explica Juan Ignacio Oñós, de Jionos Abogados.
A la hora de otorgar una custodia compartida es importante que los progenitores tengan una relación lo más cordial posible. Además, si uno de los cónyuges está inmerso en un proceso penal iniciado por atentar contra la libertad física, psíquica, la integridad moral o la libertad e indemnidad sexual del otro cónyuge, entonces la custodia compartida no podrá ser solicitada.
También hay que destacar que el Ministerio Fiscal o cualquiera de las partes podrá solicitar un informe al equipo psicosocial del Juzgado. Dicho informe será tenido en cuenta por el Juez a la hora otorgar la guarda y custodia.
Otros aspectos que se tienen en cuenta son “los deseos manifestados por los menores competentes” como indica Elena Crespo, así como “el número de hijos, el cumplimiento por parte de los progenitores de sus deberes y el respeto mutuo en sus relaciones personales, la ubicación de sus domicilios y sus horarios, y el resultado de todos los informes exigidos legalmente”.
Si quieres saber más sobre cómo hacer frente a un divorcio sin perjudicar a los hijos, además de elegir un tipo de custodia compartida existen otros consejos que puedes encontrar aquí.
Nota: Contradicciones "por doquier" en el articulo. Que el periódico se informe mejor, la realidad es otra bien distinta. Solo acierta sobre los efectos del proceso de violencia doméstica.
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