Autoestima en el Divorcio

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Un divorcio no es cosa fácil para nadie, y además de las consecuencias materiales que puede traer a quien lo pasa, están las afectaciones emocionales, en particular, a la autoestima.
El golpe que da un divorcio a la imagen propia es usualmente negativo y los cuestionamientos y la autocrítica no se hacen esperar. ¿En qué fallé? ¿Por qué yo? ¿Es mi culpa?
Independientemente de los motivos de la separación, en esos momentos, lo más importante es no dejar que la autoestima y la auto valoración caigan, para poder salir lo más pronto posible del trago amargo.
La construcción de una autoestima fuerte y saludable antes, durante y si es el caso, después del matrimonio, es importante para enfrentar los cambios que la vida trae. Seguir un curso de autoestima es importante en todos los momentos de la vida.
Algunos consejos para salir más rápidamente del proceso de duelo que trae un divorcio son:
Reafirma lo bueno en tu vida – Suena sencillo, pero agradecer lo bueno que tienes y cambiar los pensamientos y afirmaciones negativas por positivas cambiará poco a poco tu estado mental y por lo tanto tu actitud y emociones.
Piensa Positivamente – Seguro, es difícil en esos momentos de soledad pensar positivamente, pero date una oportunidad. Observa cuidadosamente lo que piensas y atrapa los pensamientos negativos para cambiarlos por ideas de alto valor que te ayuden a sentirte mejor.
Aprende meditación – Seguir un programa regular de meditación te ayudará sin duda a levantar tu autoestima. La meditación calma la mente, frena las ideas y te da serenidad y paz para entender las cosas como son, sin matizarlas con la subjetividad que todos tenemos y que se enrarece cuando pasamos un evento difícil como es el divorcio. 

Las meditaciones guiadas pueden ser útiles pues te llevan de la mano por las emociones positivas.
Deja el pasado atrás – No le des incontables vueltas al pasado, tratando de adivinar qué sucedió. Úsalo como un ejercicio de aprendizaje, para que no se vuelva a repetir, pero no rijas tu vida por las circunstancias del pasado.
Haz cambios significativos – Si quieres cambiar, de verdad, hazlo. Toma cursos, inscríbete a talleres, estudia en casa, únete a un club, cambia de empleo, rompe con la rutina y lo que no te gusta para que te motives. No hay nada peor que quedarse estancad@ en el drama. Todo cambio moverá tu autoestima en una dirección positiva.
Finalmente, date cuenta de que la vida sigue, que tienes opciones para seguir adelante y mejorar tu autoestima, que el cambio que viviste no es el fin, sino el inicio de una nueva vida.
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