Esta demostrado científicamente que el porno afecta a nuestro cerebro, que influye de manera negativa sobre nuestras relaciones sexuales y ahora, que podría tener algo de responsabilidad en la baja tasa de matrimonios.
Esto último lo asegura un estudio realizado por investigadores del Instituto alemán del estudio del parto (IZA) junto con médicos de la universidad West Chester de Pennsylvania (Estados Unidos), en cuyas conclusiones se afirma que el auge de la pornografía gratuita en Internet no solo correlaciona con una menor tasa de matrimonios entre los jóvenes, sino que podría ser una de sus causas.
En el trabajo se analizó las costumbres online de miles de jóvenes con edades comprendidas entre los 18 y 35 años. Se obtuvieron datos sobre las horas que pasaban conectados a Internet y los minutos que dedicaban a ver pornografía. Esto último lo asegura un estudio realizado por investigadores del Instituto alemán del estudio del parto (IZA) junto con médicos de la universidad West Chester de Pennsylvania (Estados Unidos), en cuyas conclusiones se afirma que el auge de la pornografía gratuita en Internet no solo correlaciona con una menor tasa de matrimonios entre los jóvenes, sino que podría ser una de sus causas.
El doctor norteamericano Michael Malcolm, uno de los autores de la investigación, explica que la intención del estudio era la de buscar la bajada en el número de matrimonios que se vive en su país: “Nos preguntamos a nosotros mismos, ¿qué ayuda o no a que un joven se case?”.
Para encontrar la causa de esta realidad, los investigadores buscaron en factores como la edad, los ingresos, la religiosidad, el empleo… Y aunque todos ellos correlacionaban con las intenciones casamenteras de los estudiados. Pero parece que el tiempo de conexión a Internet y, sobre todo el porno, ofrecían una mayor correlación. De los 1.500 sujetos analizados, los que pasaban más tiempo viendo webs religiosas o de finanzas correlacionaban positivamente con el matrimonio.
Estas conclusiones podrían ser explicadas con el sentido común: los casados ven menos pornografía en Internet porque suelen estar menos tiempo solos, algo que no ocurre con los solteros, que disfrutan de más privacidad.
Pero los autores del trabajo lo ven de otra manera: el doctor Malcolm defiende que los casados disfrutan de una mejor vida sexual y no les hace falta buscar gratificación por otro lado. En su trabajo no destacan que la situación económica sea un factor decisivo a la hora de casarse o no. Seguramente pensarían lo contrario si supieran que en España el coste medio de un enlace es de 16.534 euros.
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