Los jueces y fiscales novatos empiezan con un salario de 47.494 euros anuales. Los mejores pagados son los escoceses, con 150.106 euros al año
El salario de los jueces y fiscales españoles al inicio de sus
carreras supera en casi 1.500 € anuales la media de los 46 países europeos miembros
del Consejo de Europea, según refleja un estudio elaborado por la
Comisión Europea para la Eficacia de la Justicia (CEPEJ) que recaba
datos relativos al año 2010.
Así, el dinero percibido por los jueces de primera instancia y los fiscales al principio de su actividad laboral alcanzó en 2010 los 47.494 euros, frente a la media europea de 46.056 euros brutos anuales.
Entre los 46 países analizados se encuentran naciones como Albania, Azerbayán o Rumania cuyo salario mínimo interprofesional es también inferior al español.
El país con el salario más reducido es Moldavia, con 3. 220 euros anuales mientras que los jueces mejor pagados son los escoceses, que perciben 150.106 euros al año.
Por otro lado, España fue en 2010 el 6º país europeo con mayor presupuesto público destinado a Justicia, un total de 4.632.278.011 euros.
La ayuda judicial alcanzó ese año los 5,2 euros por habitante/año, por debajo de la media europea de 6,8 euros habitante/año.
CEPEJ ha publicado este miércoles su Vº informe de evaluación de los sistemas judiciales europeos. El estudio, de carácter bianual contiene cuadros de todos los países miembros del Consejo de Europa, excepto Liechtenstein.
El informe incluye información sobre los presupuestos de los sistemas judiciales, el acceso la justicia, el plazo para resolver demandas, la duración de los procedimientos, la ayuda judicial, el status y la carrera de jueces, fiscales y abogados, la inversión en nuevas tecnología, entre otros muchos parámetros.
También destaca que España cuenta con 10,2 jueces por cada 100.000 habitantes, frente a la media europea de 21,3 y es uno de los países con mayor nº de abogados por cada juez: un total de 26'7.
En 2010, los jueces de instrucción españoles recibieron 4.474.042 casos, ocupando así el 4º lugar entre los países europeos.
Así, el dinero percibido por los jueces de primera instancia y los fiscales al principio de su actividad laboral alcanzó en 2010 los 47.494 euros, frente a la media europea de 46.056 euros brutos anuales.
Entre los 46 países analizados se encuentran naciones como Albania, Azerbayán o Rumania cuyo salario mínimo interprofesional es también inferior al español.
El país con el salario más reducido es Moldavia, con 3. 220 euros anuales mientras que los jueces mejor pagados son los escoceses, que perciben 150.106 euros al año.
Por otro lado, España fue en 2010 el 6º país europeo con mayor presupuesto público destinado a Justicia, un total de 4.632.278.011 euros.
La ayuda judicial alcanzó ese año los 5,2 euros por habitante/año, por debajo de la media europea de 6,8 euros habitante/año.
CEPEJ ha publicado este miércoles su Vº informe de evaluación de los sistemas judiciales europeos. El estudio, de carácter bianual contiene cuadros de todos los países miembros del Consejo de Europa, excepto Liechtenstein.
El informe incluye información sobre los presupuestos de los sistemas judiciales, el acceso la justicia, el plazo para resolver demandas, la duración de los procedimientos, la ayuda judicial, el status y la carrera de jueces, fiscales y abogados, la inversión en nuevas tecnología, entre otros muchos parámetros.
También destaca que España cuenta con 10,2 jueces por cada 100.000 habitantes, frente a la media europea de 21,3 y es uno de los países con mayor nº de abogados por cada juez: un total de 26'7.
En 2010, los jueces de instrucción españoles recibieron 4.474.042 casos, ocupando así el 4º lugar entre los países europeos.
El informe
señala que casualmente los países con mayor nº de casos recibidos
por magistrado son aquellos que cuentan con el menor nº de jueces
por cada 100.000 habitantes. La media europea fue de 615'2 casos por
juez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Hola, solo se podra responder a los comentarios o preguntas si nos indicas un email de contacto.