LA RIOJA: Ninguna Ley acabará con la violencia de género si la sociedad no la rechaza.
El delegado del Gobierno contra la Violencia de Género, Miguel Lorente, señaló que poco a poco se dan «cambios positivos»
13.11.10 M. MUÑOZ.LOGROÑO.
Cuando la denuncia viene de fuera de la víctima, en el 80% de los casos la lleva a cabo una mujer .
«Nunca habrá una Ley o institución que pueda acabar con la violencia de género si no hay también una sociedad que rechace este tipo de conductas».
El delegado del Gobierno contra la Violencia de Género, Miguel Lorente, ofreció ayer en el Círculo Logroñés una conferencia en la que ofreció un análisis evolutivo sobre este problema.
Lorente transmitió un mensaje de «esperanza y confianza, porque vamos detectando cambios positivos», y aseguró que «ha comenzado la cuenta atrás» para erradicar esta lacra social.
Consideró «preocupante» el descenso de las denuncias efectuadas el año pasado, y apostó por extender la atención a mujeres que, por vivir en un entorno rural o por su origen inmigrante, se puedan encontrar más desprotegidas.
De hecho, Lorente constató un aumento en los últimos meses de los casos de violencia de género en edades más avanzadas.
Fue muy crítico con unas referencias culturales que «hacen creer a muchos hombres que la violencia es legítima».
«Incluso la víctima ve con cierta normalización el problema», advirtió.
Con los datos de una encuesta realizada en el contexto nacional, mostró que el 1,2% de la población ve justificada la violencia en algunas circunstancias.
El porcentaje es bajo, «pero eso son 500.000 hombres y mujeres, y recordemos que las denuncias fueron 135.000 que los que matan fueron 70».
En este sentido, insistió en que «ahora puede haber en España 10 o 15 hombres pensando y dándose razones para matar a su mujer».
Medios de comunicación.
Por ello, pidió a los medios de comunicación prudencia a la hora de abordar los homicidios, y avanzó que un estudio universitario está midiendo la relación entre estas noticias y la comisión de nuevos crímenes en los días posteriores, como se ha demostrado en los casos de suicidio.
También denunció Lorente el aumento de «la potenciación de la mujer como objeto sexual, que puede llevar a una 'cosificación' de la mujer, una deshumanización por parte del hombre».
No olvidó el papel del entorno de las víctimas, al que pidió «responsabilidad y no mirar para otro lado». En este punto, ofreció un dato significativo.
Cuando la denuncia no llega por la propia víctima, en el 80% de los casos llega por otra mujer (hermana, madre, amiga...) «El hombre se implica menos», destacó.
Por último, valoró la utilidad de herramientas como las pulseras GPS.
«Con los 461 dispositivos instalados hubo 3.000 alarmas hasta el verano y seguro que han evitado homicidios».
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Hola, solo se podra responder a los comentarios o preguntas si nos indicas un email de contacto.