En
opinión del abogado litigante David Acosta Mata, el costo más alto del
divorcio no es de tipo económico sino social por el daño que se causa a
los hijos, sean o no menores de edad, y el estigma derivado de
prejuicios característicos de la vida en sociedad.
Explicó
que hay divorcios necesarios y divorcios de mutuo acuerdo y en ambos,
se requieren los servicios de un abogado particular o de oficio, según
las características socioeconómicas de la pareja.
Desde su punto de vista, la paradoja del divorcio en ambos casos, es que los inconformes solucionan su situación jurídica, pero se olvidan del daño que causan a sus hijos y parientes al sobrevenir la desintegración de los núcleos familiares.
En términos económicos, señaló que un abogado puede cobrar tal o cual cantidad por sus servicios, lo que resulta un costo relativo, ya que el dinero va y viene, pero el costo social es significativo por tratarse de personas y vidas en juego.
Respecto al tiempo que puede tardar un proceso de divorcio, mencionó que puede ser de 2 a 3 meses cuando es por mutuo acuerdo, y entre 6 y 8 meses cuando se da en circunstancias necesarias, como el otorgamiento de recursos para la manutención de los hijos, enfermedades psiquiátricas o violencia intrafamiliar.
Finalmente, mencionó que un abogado con ética debe hacer ver a las personas que desean divorciarse las consecuencias sociales que puede tener su decisión y si es posible, tratar de que lleguen a un acuerdo para evitar la disolución de su matrimonio.
Desde su punto de vista, la paradoja del divorcio en ambos casos, es que los inconformes solucionan su situación jurídica, pero se olvidan del daño que causan a sus hijos y parientes al sobrevenir la desintegración de los núcleos familiares.
En términos económicos, señaló que un abogado puede cobrar tal o cual cantidad por sus servicios, lo que resulta un costo relativo, ya que el dinero va y viene, pero el costo social es significativo por tratarse de personas y vidas en juego.
Respecto al tiempo que puede tardar un proceso de divorcio, mencionó que puede ser de 2 a 3 meses cuando es por mutuo acuerdo, y entre 6 y 8 meses cuando se da en circunstancias necesarias, como el otorgamiento de recursos para la manutención de los hijos, enfermedades psiquiátricas o violencia intrafamiliar.
Finalmente, mencionó que un abogado con ética debe hacer ver a las personas que desean divorciarse las consecuencias sociales que puede tener su decisión y si es posible, tratar de que lleguen a un acuerdo para evitar la disolución de su matrimonio.
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