domingo, 7 de septiembre de 2008

Divorcio y Vacaciones en España

http://www.laopiniondezamora.es/secciones/noticia.jsp?pRef=2008090600_2_299874__Zamora-vuelta-vacaciones-dispara-rupturas-matrimoniales
La vuelta de las vacaciones dispara un 30% las rupturas matrimoniales.

La Asociación de Separados de Zamora detecta un incremento de divorcios de mutuo acuerdo.
TERESA SANTOS. Sábado 06 de septiembre de 2008

La vuelta de las vacaciones acaba con un mayor número de matrimonios del habitual en otras épocas del año.
La Asociación de Separados, Divorciados y Viudos de Zamora, Asediviza, calcula en un 30% el aumento de las rupturas entre los meses de septiembre y octubre, estimación que extrae del incremento de casos que llegan a ese colectivo en busca de información y asesoramiento.

El por qué hay que buscarlo, entre otras cosas, en el mayor tiempo de convivencia durante los períodos de descanso.
«Cuanto más tiempo pasan juntos, más roces hay, y más ven que no hay vuelta de hoja, que no se soportan el uno al otro», explica María de los Angeles Morillo, presidenta de Asediviza y abogada especializada en separaciones y divorcios.

Lo mismo sucede tras las vacaciones de Navidad, cuando se multiplican las reuniones familiares y salen a relucir los «trapos sucios».
Porque en un buen número de casos, indica Morillo, las desavenencias de la pareja están influenciadas, de alguna manera, por las distintas familias.

El aumento de rupturas tras el asueto estriba también en las segundas oportunidades fallidas. «Mucha gente se lo piensa antes, porque la cosa va mal, pero espera a las vacaciones a ver si mejora la relación».
La Asociación de Separados se hace eco del aumento tanto de los divorcios, frente a las separaciones, como de los casos de mutuo acuerdo.
«La mayoría de los abogados están mentalizados de llegar a un acuerdo, aunque los cónyuges no se hablen».
El pacto tiene sus ventajas, en el plano tanto económico como emocional, pero sobre todo desde el punto de vista de los más pequeños, a los que afortunadamente se les deja cada vez más fuera del proceso de separación, según lo observado por la abogada.
Aún así, «todavía hay casos en los que se les malmete, dificultando el régimen de visitas, con lo que se termina dando el síndrome de alienación parental».

Los divorcios ganan frente a las separaciones, por puro pragmatismo.
Cuando no se vislumbran posibilidades de reconciliación se opta por el divorcio directo, porque los gastos se duplican de pasar primero por una separación y luego por un divorcio.
Si la reconciliación es posible, bastaría con tramitar un escrito para dejar sin efecto una separación, mientras que eso en caso de divorcio ya no sería factible.

Asediviza recibe, sobre todo, las consultas de personas que, bien están a punto de iniciar la ruptura matrimonial, bien están ya separadas o divorciadas y tienen problemas por incumplimiento del pago de la pensión, por ejemplo.
«La gente que ya ha pasado por el proceso de una separación vienen por problemas en la ejecución del convenio regulador o de la sentencia de divorcio».

La Asociación de Separados y Divorciados está formada actualmente por casi una treintena de socios.
Lo habitual es que las personas que reciben el apoyo de la agrupación se den de alta, para darse de baja una vez resueltos los problemas.
También presta ayuda jurídica y psicológica, además de organizar una vez al mes terapia de grupo y mantener un taller de convivencia social, además de trabajar en la integración laboral de personas con pocos estudios, a través de la elaboración de currículum o la preparación de entrevistas de trabajo.

El régimen de visitas, menos usado contra el otro.
Los expertos han notado un descenso en la práctica de inducir a los hijos contra uno de los progenitores.
Los menores «cada vez se respetan más», apunta Gloria Hernando, psicóloga de la Asociación de Separados, Divorciados y Viudos de Zamora, Asediviza.
Con todo, los niños «se siguen utilizando como moneda de cambio».
Aunque sí se aprecia que la «normalización» de las separaciones, algo que se observa ya en el medio rural, ha influido para que, por ejemplo, «los abuelos malmetan menos».

En verano se intentan quemar los últimos cartuchos antes de separarse, y así sucede que «muchas parejas utilizan el verano para quedarse embarazadas».
Sólo que ese intento «desgraciadamente no funciona».
Los problemas de pareja «se complican con los niños».
Que un bebé sea la solución a los problemas de pareja no es más que un «falso mito».

A finales de septiembre se produce un «pico alto» de separaciones.
Y este año puede retrasarse un poco más que otros años.
«La gente todavía está volviendo de las vacaciones porque, con la crisis, se aprovecha más el mes de septiembre».

No hay comentarios: